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Alfonsina Storni

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  • Alfonsina Storni

    Quiero abrir este hilo para dedicarlo a la poesía de Alfonsina Storni, gran poeta y gran mujer, de versos colmados de dolor. Un poco de su vida encontrarán en el siguiente enlace:

    http://tu.tv/videos/alfonsina-storni-biografia

    Dolor

    Quisiera esta tarde divina de octubre
    pasear por la orilla lejana del mar;
    que la arena de oro, y las aguas verdes,
    y los cielos puros me vieran pasar.

    Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera,
    como una romana, para concordar
    con las grandes olas, y las rocas muertas
    y las anchas playas que ciñen el mar.

    Con el paso lento, y los ojos fríos
    y la boca muda, dejarme llevar;
    ver cómo se rompen las olas azules
    contra los granitos y no parpadear;

    ver cómo las aves rapaces se comen
    los peces pequeños y no despertar;
    pensar que pudieran las frágiles barcas
    hundirse en las aguas y no suspirar;

    ver que se adelanta, la garganta al aire,
    el hombre más bello, no desear amar...

    Perder la mirada, distraídamente,
    perderla y que nunca la vuelva a encontrar:
    y, figura erguida, entre cielo y playa,
    sentirme el olvido perenne del mar.

  • #2
    Re: Alfonsina Storni




    Parzival.Qué maravilla hablar de Alfonsina Storni!
    Me he permitido traer aqui un poco de ella, para presentarla. Está bien?
    y luego su poesía que con tanto tino escoges. Y gracias por permitirnos compartir contigo.


    Alfonsina Storni Martignoni nació el 29 de mayo de 1892 en Capriasca (Suiza) en el seno de una familia dedicada a los negocios cerveceros.

    Sus padres, años más tarde, se vieron obligados a marchar con sus hijos hacia Argentina en busca de un futuro mejor.

    En 1907 ingresa como actriz en una compañía de teatro itinerante que se desplaza por todo el país. Poco después, comenzó sus estudios de magisterio en la región de Coronda, lugar en el que recibe el título de maestra.

    Hacia 1911 la hermosa poetisa se traslada a Buenos Aires, ciudad en la que al año siguiente nace su hijo Alejandro.
    No hay duda de que este acontecimiento se presenta como un punto de inflexión en la vida de Alfonsina Storni, pues, el hecho de ser madre soltera hace que se enfrente -constantemente- a la sociedad de la época.

    En 1916, a pesar de las penurias económicas logra publicar La inquietud del rosal y comienza a relacionarse con intelectuales como José Enrique Rodó, Amado Nervo, José Ingenieros y Manuel Ugarte.
    Esta es una época en la que la situación económica de Alfonsina mejora y hace frecuentes viajes a Montevideo, donde conoce a la poetisa Juana de Ibarbourou y al que sería su gran amigo: el escritor uruguayo Horacio Quiroga.

    Su libro Languidez, publicado en 1920, fue galardonado con el Primer Premio Municipal de Poesía y el Segundo Premio Nacional de Literatura. En 1925 publica Ocre, una obra que marca un cambio decisivo en su trayectoria.
    A pesar de todo ello, la soledad y la marginación literaria hacen mella en salud de Alfonsina.
    La neurosis le obliga, en ocasiones, a dejar su puesto de maestra de escuela. No obstante, varios viajes a Europa (1930 y 1934) motivaron una evolución hacia un lirismo libre de moldes formales, dramático y descarnado, así como de una audacia erótica insólita para la época con nuevas meditaciones feministas: Mundo de siete pozos (1934) y Mascarilla ytreboll (1938).
    Pero, tras la muerte por suicidio de su inseparable amigo el escritor Horacio Quiroga, Alfonsina, el día 23 de octubre de 1938, también decide poner fin a su vida adentrándose en la playa La Perla (en el Mar de la Plata).

    Parece ser que, en el mismo momento en que era hallado el cadáver de Alfonsina Storni, salía publicado su último poema en el periódico “La Nación”, cuyos versos finalizaban diciendo:
    Y si llama él no le digan que estoy / Dile que Alfonsina no vuelve / Y si llama él no le digan nunca que estoy /Di que me he ido

    Alfonsina fue inmortalizada por el compositor argentino Ariel Ramírez y el escritor Félix Luna en la canción[B] Alfonsina y el Mar, [/B]considerada -por muchos, entre los que me incluyo- uno de los himnos de Hispanoamérica.

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    • #3
      Re: Alfonsina Storni

      Alfonsina y el mar

      Por la blanda arena que lame el mar
      Su pequeña huella no vuelve mas,
      Un sendero solo de pena y silencio llego
      Hasta el agua profunda,
      Un sendero solo de penas mudas llego
      Hasta la espuma.

      Sabe dios que angustia te acompaño
      Que dolores viejos callo tu voz
      Para recostarte arrullada en el canto
      De las caracolas marinas
      La cancion que canta en el fondo oscuro del mar
      La caracola.

      Te vas alfonsina con tu soledad
      Que poemas nuevos fuiste a buscar ...?
      Una voz antigua de viento y de sal
      Te requiebra el alma y la esta llevando
      Y te vas hacia alla como en sueños,
      Dormida, alfonsina, vestida de mar ...

      Cinco sirenitas te llevaran
      Por caminos de algas y de coral
      Y fosforecentes caballos marinos haran
      Una ronda a tu lado
      Y los habitantes del agua van a jugar
      Pronto a tu lado.

      Bajame la lampara un poco mas
      Dejame que duerma nodriza en paz
      Y si llama el no le digas que estoy
      Dile que alfonsina no vuelve ...
      Y si llama el no le digas nunca que estoy,
      Di que me he ido ...

      Te vas alfonsina con tu soledad
      Que poemas nuevos fuiste a buscar ...?
      Una voz antigua de viento y de sal
      Te requiebra el alma y la esta llevando
      Y te vas hacia alla como en sueños,
      Dormida, alfonsina, vestida de mar ...


      Ariel Ramirez
      Félix Luna

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      • #4
        Re: Alfonsina Storni

        Comment


        • #5
          Re: Alfonsina Storni

          Oh Tatiana, claro que puedes poner sus poesías, hablar sobre ella y colocar imágenes - la que pusiste excelente, ella siempre pensó en el mar - este hilo es para los que amamos la poesía de Alfonsina.

          Cuando murió su gran amigo, Horacio Quiroga, ella lo resintió demasiado, escribió una poesía que hace pensar que quería ese trágico final que tuvo.

          Morir como tú, Horacio, en tus cabales,
          Y así como en tus cuentos, no está mal;
          Un rayo a tiempo y se acabó la feria…

          Allá dirán.
          Más pudre el miedo, Horacio, que la muerte
          Que a las espaldas va.
          Bebiste bien, que luego sonreías…
          Allá dirán.


          Lo cierto es que padecía cancer de mama, le amputaron un seno, pero no se erradicó la enfermedad. Unos días antes de morir, mandó su último poema al diario 'La Nación', donde había laborado. Al anunciar la muerte de ella, el diario también publica este poema:

          Voy a Dormir

          Dientes de flores, cofia de rocío,
          manos de hierbas, tú, nodriza fina,
          tenme prestas las sábanas terrosas
          y el edredón de musgos encardados.
          Voy a dormir, nodriza mía, acuéstame.
          Ponme una lámpara a la cabecera,
          una constelación, la que te guste:
          todas son buenas; bájala un poquito.
          Déjame sola: oyes romper los brotes...
          te acuna un pie celeste desde arriba
          y un pájaro te traza unos compases
          para que olvides... Gracias. Ah, un encargo:
          si él llama nuevamente por teléfono
          le dices que no insista, que he salido...

          Pero lejos de la muerte que se envuelve en un halo de romanticismo, ella escribió hermosos versos que sangraban de tanto dolor, eran letras escritas con lágrimas, más que con tinta, luchando siempre contra el yugo de los prejuicios de esa época.

          TU ME QUIERES BLANCA

          Tú me quieres alba,
          Me quieres de espumas,
          Me quieres de nácar.
          Que sea azucena
          Sobre todas, casta.
          De perfume tenue.
          Corola cerrada

          Ni un rayo de luna
          Filtrado me haya.
          Ni una margarita
          Se diga mi hermana.
          Tú me quieres nívea,
          Tú me quieres blanca,
          Tú me quieres alba.

          Tú que hubiste todas
          Las copas a mano,
          De frutos y mieles
          Los labios morados.
          Tú que en el banquete
          Cubierto de pámpanos
          Dejaste las carnes
          Festejando a Baco.
          Tú que en los jardines
          Negros del Engaño
          Vestido de rojo
          Corriste al Estrago.

          Tú que el esqueleto
          Conservas intacto
          No sé todavía
          Por cuáles milagros,
          Me pretendes blanca
          (Dios te lo perdone),
          Me pretendes casta
          (Dios te lo perdone),
          ¡Me pretendes alba!

          Huye hacia los bosques,
          Vete a la montaña;
          Límpiate la boca;
          Vive en las cabañas;
          Toca con las manos
          La tierra mojada;
          Alimenta el cuerpo
          Con raíz amarga;
          Bebe de las rocas;
          Duerme sobre escarcha;
          Renueva tejidos
          Con salitre y agua;
          Habla con los pájaros
          Y lévate al alba.
          Y cuando las carnes
          Te sean tornadas,
          Y cuando hayas puesto
          En ellas el alma
          Que por las alcobas
          Se quedó enredada,
          Entonces, buen hombre,
          Preténdeme blanca,
          Preténdeme nívea,
          Preténdeme casta.

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          • #6
            Re: Alfonsina Storni

            Wow, la canción la conozco bien una amiga mía la canta de una manera que refleja todo lo que la poetísa llevaba dentro. Cuando la visite voy a pedirle que la grabe y se las traigo aquí.
            Te extrañaría aunque no nos hubiéramos conocido...

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            • #7
              Re: Alfonsina Storni

              Sería grandioso poder escuchar esa hermosa canción Bug, sería grandioso. ¡Ah, Alfonsina abarca tantos corazones!

              Frente al mar

              Oh mar, enorme mar, corazón fiero
              De ritmo desigual, corazón malo,
              Yo soy más blanda que ese pobre palo
              Que se pudre en tus ondas prisionero.

              Oh mar, dame tu cólera tremenda,
              Yo me pasé la vida perdonando,
              Porque entendía, mar, yo me fui dando:
              "Piedad, piedad para el que más ofenda".

              Vulgaridad, vulgaridad me acosa.
              Ah, me han comprado la ciudad y el hombre.
              Hazme tener tu cólera sin nombre:
              Ya me fatiga esta misión de rosa.

              ¿Ves al vulgar? Ese vulgar me apena,
              Me falta el aire y donde falta quedo,
              Quisiera no entender, pero no puedo:
              Es la vulgaridad que me envenena.

              Me empobrecí porque entender abruma,
              Me empobrecí porque entender sofoca,
              ¡Bendecida la fuerza de la roca!
              Yo tengo el corazón como la espuma.

              Mar, yo soñaba ser como tú eres,
              Allá en las tardes que la vida mía
              Bajo las horas cálidas se abría...
              Ah, yo soñaba ser como tú eres.

              Mírame aquí, pequeña, miserable,
              Todo dolor me vence, todo sueño;
              Mar, dame, dame el inefable empeño
              De tornarme soberbia, inalcanzable.

              Dame tu sal, tu yodo, tu fiereza,
              ¡Aire de mar!... ¡Oh tempestad, oh enojo!
              Desdichada de mí, soy un abrojo,
              Y muero, mar, sucumbo en mi pobreza.

              Y el alma mía es como el mar, es eso,
              Ah, la ciudad la pudre y equivoca
              Pequeña vida que dolor provoca,
              ¡Que pueda libertarme de su peso!

              Vuele mi empeño, mi esperanza vuele...
              La vida mía debió ser horrible,
              Debió ser una arteria incontenible
              Y apenas es cicatriz que siempre duele.

              Comment


              • #8
                Re: Alfonsina Storni

                la caricia perdida


                Se me va de los dedos la caricia sin causa,
                se me va de los dedos... En el viento, al pasar,
                la caricia que vaga sin destino ni objeto,
                la caricia perdida ¿quién la recogerá?

                Pude amar esta noche con piedad infinita,
                pude amar al primero que acertara a llegar.
                Nadie llega. Están solos los floridos senderos.
                La caricia perdida, rodará... rodará...

                Si en los ojos te besan esta noche, viajero,
                si estremece las ramas un dulce suspirar,
                si te oprime los dedos una mano pequeña
                que te toma y te deja, que te logra y se va.

                Si no ves esa mano, ni esa boca que besa,
                si es el aire quien teje la ilusión de besar,
                oh, viajero, que tienes como el cielo los ojos,
                en el viento fundida, ¿me reconocerás?

                Tienes razón Parzival, ella es tan doliente, tan desesperanzada y a la vez tan intensa. Me gusta mucho pero nunca he podido sustraerme a la tristeza que me llega como un ramalazo cada vez que la leo; muy diferente a la admiración que siento por la elegancia de la de Ibarbouru, aun cuando hable de amor y de soledad.
                Un abrazo.

                Comment


                • #9
                  Re: Alfonsina Storni

                  Es hermosisimo
                  Aunque a mi eso de la poesía no se me da mucho Storni me encanta

                  Pienso que los poetas o tienen mucha tristeza o melancolía y como que no es para mi,
                  prefiero algo como Storni, aunque aveces se quiere cortar las venas con bimbo

                  Aunque mi ídolo.. desde ya es mi adorado Benedetti que por cierto lo tengo olvidado...
                  Lorena Figueroa
                  De sangre azul y oro
                  Last edited by Lorena Figueroa; 19-octubre-2010, 16:39.
                  Lo mas terrible se aprende enseguida y lo hermoso nos cuesta la vida... Silvio Rodríguez

                  Comment


                  • #10
                    Re: Alfonsina Storni

                    Claro que se te da amiga.
                    Tenemos tonos o matices, a mi estas dos mujeres me encantan desde que estaba en el colegio. Y aunque durante muchísimos años me alejé de la poesía, siempre estuvo ahi mi gusto y el recuerdo de toodos estos poet@s predilectos.
                    Si te gusta Benedetti claro que te gusta la poesía, cada una de sus frases destila poesís; profundamente aunque lo diga de una manera tan sencilla

                    Mas de la Storni


                    Pudiera ser que todo lo que en verso he sentido
                    no fuera más que aquello que nunca pudo ser,
                    no fuera más que algo vedado y reprimido
                    de familia en familia, de mujer en mujer.

                    Dicen que en los solares de mi gente, medido
                    estaba todo aquello que se debía hacer...
                    Dicen que silenciosas las mujeres han sido
                    de mi casa materna... Ah, bien pudiera ser...

                    A veces en mi madre apuntaron antojos
                    de liberarse, pero, se le subió a los ojos
                    una honda amargura, y en la sombra lloró.

                    Y todo esto mordiente, vencido, mutilado,
                    todo esto que se hallaba en su alma encerrado,
                    pienso que sin quererlo lo he libertado yo.

                    Comment


                    • #11
                      Re: Alfonsina Storni

                      the inhale that makes the exhale so much better

                      Comment


                      • #12
                        Re: Alfonsina Storni

                        ALMA DESNUDA

                        Alma que ha de morir de una fragancia
                        De un suspiro, de un verso en que se ruega,
                        Sin perder, a poderlo, su elegancia.

                        Alma que nada sabe y todo niega
                        Y negando lo bueno el bien propicia
                        Porque es negando como más se entrega.

                        Alma que suele haber como delicia
                        Palpar las almas, despreciar la huella,
                        Y sentir en la mano una caricia.

                        Alma que siempre disconforme de ella,
                        Como los vientos vaga, corre y gira;
                        Alma que sangra y sin cesar delira
                        Por ser el buque en marcha de la estrella
                        [/CENTER]
                        the inhale that makes the exhale so much better

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