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Re: Para no trollear
De dolor y dolores
Notable la respuesta ante los medios de la madre del secuestrado y asesinado ex estudiante Norberto. Hasta bendiciones mandó a los asesinos de su hijo.
Aprenda don cubo.
Digo, porque ya imagino que estará "pensando" de la "perra" Sheinbaum, "cara avinagrada" y este caso que, por cierto, ¿ya lo incluyó en la suma de los muertos de López Obrador?
Por alguna razón, anoche mientras veía a la señora que con evidente dolor de madre decía "venía por el certificado de estudios de mi hijo y me voy con el de defunción" o algo así, me vino a la mente el caso del secuestro de la hija de Nelson Vargas en 2007; su dolor, desesperación, indignación contra las autoridades y toda la angustia que tuvo que soportar al lado de su familia por 15 meses (¡15 meses!) hasta que por fin hallaron e identificaron el cadáver de su hija Silvia.
Perder a un hijo o familiar en circunstancias trágicas siempre será uno de los eventos en la vida más duros de soportar, pero al menos a esta señora le queda el consuelo de que hayan localizado pronto el cuerpo de su hijo y no vivir el infierno de la angustia como lo vivió el profesor Vargas.
Ya luego si los medios merolicos y el público ídem quieren politizar la noticia a sombrerazos y agudos gritos de histeria, eso ya es pedo y paranoia de cada quien.
Así nomás.
De dolor y dolores
Notable la respuesta ante los medios de la madre del secuestrado y asesinado ex estudiante Norberto. Hasta bendiciones mandó a los asesinos de su hijo.
Aprenda don cubo.
Digo, porque ya imagino que estará "pensando" de la "perra" Sheinbaum, "cara avinagrada" y este caso que, por cierto, ¿ya lo incluyó en la suma de los muertos de López Obrador?
Por alguna razón, anoche mientras veía a la señora que con evidente dolor de madre decía "venía por el certificado de estudios de mi hijo y me voy con el de defunción" o algo así, me vino a la mente el caso del secuestro de la hija de Nelson Vargas en 2007; su dolor, desesperación, indignación contra las autoridades y toda la angustia que tuvo que soportar al lado de su familia por 15 meses (¡15 meses!) hasta que por fin hallaron e identificaron el cadáver de su hija Silvia.
Perder a un hijo o familiar en circunstancias trágicas siempre será uno de los eventos en la vida más duros de soportar, pero al menos a esta señora le queda el consuelo de que hayan localizado pronto el cuerpo de su hijo y no vivir el infierno de la angustia como lo vivió el profesor Vargas.
Ya luego si los medios merolicos y el público ídem quieren politizar la noticia a sombrerazos y agudos gritos de histeria, eso ya es pedo y paranoia de cada quien.
Así nomás.
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