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EL EJERCITO MEXICANO
En general, tanto el ejército de tierra, como la armada y la fuerza aérea, son corporaciones e instituciones un tanto decorativas, porque nunca han entrado en combate en una guerra contra una fuerza extranjera. De acuerdo con lo anterior, las fuerzas navales cuentan solo con algunos guardacostas y otras embarcaciones de menor tamaño, que están dotados de un armamento ridículo y nada que valga la pena. Desde luego los submarinos son desconocidos.
La fuerza aérea es igualmente casi solo simbólica, y solo dispone de unas pocas cuadrillas de aviones caza de turbina de la época de los 80s del siglo pasado. Obviamente no cuenta con bombarderos de cualquier clase y solo de unos aviones de transporte, que son usados para una incipiente fuerza de paracaidistas. Creo que también cuenta con algunos helicópteros que últimamente se han estado cayendo solos.
El ejército es quizás el menos desequipado, porque cuenta con algunos vehículos blindados, que no son tanques, algunos cañones de corto calibre y obuses y una tropa de no más de cien mil hombres, entre zapadores, e infantería armada con ametralladoras y bazookas y portamisiles.
La disciplina parece ser buena y más bien cada soldado se siente orgulloso cuando desfila por el “Zócalo” cada día 16 de septiembre para conmemorar la independencia mexicana, y puede mostrar sus uniformes, sus armas y equipo bien lustrado.
Gracias a Dios nunca han tenido que enfrentarse a un ejército enemigo, equipado con armamento convencional pero moderno, y su labor mayormente ha sido de rescate y salvamento de la población civil en casos de emergencias naturales. Es por lo tanto el ejército mexicano un ejército de paz que no acostumbra usar sus armas con munición verdadera, ni han jalado ningún gatillo para matar a alguien.
Pero lo más insólito es, que el ejército mexicano no se rige por las leyes marciales, sino que se rige por las leyes civiles, y sus elementos tienen la obligación de conocer no solo los “Derechos Humanos” sino también deben saber lo que es un Ministerio Público y la tipificación de los delitos más elementales como el robo con o sin violencia, el secuestro, el contrabando y la piratería y la tala ilegal de árboles, etc.etc. Las leyes marciales solo entran en función en un estado de emergencia y la suspensión de las garantías individuales, cosa que en México no ha sucedido desde 1914.
Sin embargo el ejército mexicano ha adquirido tal imagen de servicio a la comunidad civil, que en una ocasión, sucedió algo tremendamente insólito: Obtuvo del gobierno norteamericano el permiso para pisar suelo estadounidense para prestar ayuda humanitaria a la población civil de Nueva Orleáns con motivo del huracán Katrina. Se hace la aclaración, de que el ejército mexicano iba totalmente equipado con su equipo militar, solo que sin armas.
Como tal una vez terminada su labor, el convoy completo pudo regresar sin problemas a través de territorio norteamericano, hasta llegar salvo y sano a pisar de nuevo suelo mexicano.
Pero ahora a partir del año 2006 el nuevo gobierno de Felipe Calderón, ha decidido combatir el crimen organizado y el narcotráfico con la máxima fuerza que le da la Constitución, y que es precisamente el ejército mexicano. Pero se ha declarado a todas voces, que
se le ha declarado LA GUERRA al narcotráfico
como parte inherente del crimen organizado, y ahora los soldados con todo su equipo de campaña, MENOS SUS CASCOS DE ACERO, pero con fusil al hombro se les ve arrancando la hierba de los plantíos de marihuana y de amapola para como cualquier trabajador del campo amontonarla en pacas , pesarla cuidadosamente, para el correspondiente informe a la superioridad y luego quemarla.
Yo comprendo, que los soldados vistan el uniforme de campaña y hasta carguen su fusil, porque aparte de los inofensivos campesinos, puede haber elementos de la mafia del narco, que pretendan evitar la destrucción con sus armas. Sin embargo si hubiese en realidad un tiroteo con potentes armas de fuego, los “pobres” soldados tendrían menos protección, gracias a que no llevan sus cascos de acero…. Independientemente de que supongo, que como siempre, las balas del criminal si matan, mientras que las balas del ejército a lo mejor no dan en el blanco.
Pero el verdadero problema en México radica en el hecho, de que HAY UNA DECLARACION DE GUERRA, Y SIGUEN REGIENDO LAS LEYES CIVILES Y LA LEY DE LOS DERECHOS HUMANOS
Resulta de esta manera, que un soldado en estado de guerra, no puede matar a un narcotraficante impunemente, ya que tanto el ministerio público, como la Organización de Derechos Humanos ponen el grito en el cielo, y el pobre cabo o sargento tendría que enfrentar un juicio civil, para alegar defensa propia, porque un huarachudo con una metralleta de grueso calibre lo atacó, con intenciones de matar.
Finalmente quiero mencionar, que en el canal “Proyecto 40” de la TV, acabo de ver un reporte sobre el ejército mexicano muy interesante. Pero en uno de sus capítulos muestran un SIMULACRO DE COMBATE de una emboscada que le tendieron los narcotraficantes.
Obviamente todo estaba perfectamente programado y cada uno de los elementos tanto del ejército, como del “enemigo” sabían de antemano lo que había que hacer, y como en un foro de un teatro, todo acabó de maravilla.
Pero en todo ese escenario, me llamó poderosamente la atención, de que ninguno de los soldados llevaba casco de acero sino que cómodamente llevaban sus gorras de visera. … al fin que todo era “de a mentiras” ni nadie tiraba con munición “de a de veras”.
De paso sea dicho, yo nunca supe de que el ejercito mexicano haya hecho MANIOBRAS … por lo regular entre “rojos” y “azules” con todo el equipo de guerra, con la única diferencia, de que las municiones trazadoras en lugar de proyectiles mortales disparan cápsulas de color, marcando así el acierto o el “fuera de combate”….y que ninguno de los dos bandos sabe lo que hará el otro.
ASI ES COMO VERDADERAMENTE SE CAPACITA UN EJERCITO
En general, tanto el ejército de tierra, como la armada y la fuerza aérea, son corporaciones e instituciones un tanto decorativas, porque nunca han entrado en combate en una guerra contra una fuerza extranjera. De acuerdo con lo anterior, las fuerzas navales cuentan solo con algunos guardacostas y otras embarcaciones de menor tamaño, que están dotados de un armamento ridículo y nada que valga la pena. Desde luego los submarinos son desconocidos.
La fuerza aérea es igualmente casi solo simbólica, y solo dispone de unas pocas cuadrillas de aviones caza de turbina de la época de los 80s del siglo pasado. Obviamente no cuenta con bombarderos de cualquier clase y solo de unos aviones de transporte, que son usados para una incipiente fuerza de paracaidistas. Creo que también cuenta con algunos helicópteros que últimamente se han estado cayendo solos.
El ejército es quizás el menos desequipado, porque cuenta con algunos vehículos blindados, que no son tanques, algunos cañones de corto calibre y obuses y una tropa de no más de cien mil hombres, entre zapadores, e infantería armada con ametralladoras y bazookas y portamisiles.
La disciplina parece ser buena y más bien cada soldado se siente orgulloso cuando desfila por el “Zócalo” cada día 16 de septiembre para conmemorar la independencia mexicana, y puede mostrar sus uniformes, sus armas y equipo bien lustrado.
Gracias a Dios nunca han tenido que enfrentarse a un ejército enemigo, equipado con armamento convencional pero moderno, y su labor mayormente ha sido de rescate y salvamento de la población civil en casos de emergencias naturales. Es por lo tanto el ejército mexicano un ejército de paz que no acostumbra usar sus armas con munición verdadera, ni han jalado ningún gatillo para matar a alguien.
Pero lo más insólito es, que el ejército mexicano no se rige por las leyes marciales, sino que se rige por las leyes civiles, y sus elementos tienen la obligación de conocer no solo los “Derechos Humanos” sino también deben saber lo que es un Ministerio Público y la tipificación de los delitos más elementales como el robo con o sin violencia, el secuestro, el contrabando y la piratería y la tala ilegal de árboles, etc.etc. Las leyes marciales solo entran en función en un estado de emergencia y la suspensión de las garantías individuales, cosa que en México no ha sucedido desde 1914.
Sin embargo el ejército mexicano ha adquirido tal imagen de servicio a la comunidad civil, que en una ocasión, sucedió algo tremendamente insólito: Obtuvo del gobierno norteamericano el permiso para pisar suelo estadounidense para prestar ayuda humanitaria a la población civil de Nueva Orleáns con motivo del huracán Katrina. Se hace la aclaración, de que el ejército mexicano iba totalmente equipado con su equipo militar, solo que sin armas.
Como tal una vez terminada su labor, el convoy completo pudo regresar sin problemas a través de territorio norteamericano, hasta llegar salvo y sano a pisar de nuevo suelo mexicano.
Pero ahora a partir del año 2006 el nuevo gobierno de Felipe Calderón, ha decidido combatir el crimen organizado y el narcotráfico con la máxima fuerza que le da la Constitución, y que es precisamente el ejército mexicano. Pero se ha declarado a todas voces, que
se le ha declarado LA GUERRA al narcotráfico
como parte inherente del crimen organizado, y ahora los soldados con todo su equipo de campaña, MENOS SUS CASCOS DE ACERO, pero con fusil al hombro se les ve arrancando la hierba de los plantíos de marihuana y de amapola para como cualquier trabajador del campo amontonarla en pacas , pesarla cuidadosamente, para el correspondiente informe a la superioridad y luego quemarla.
Yo comprendo, que los soldados vistan el uniforme de campaña y hasta carguen su fusil, porque aparte de los inofensivos campesinos, puede haber elementos de la mafia del narco, que pretendan evitar la destrucción con sus armas. Sin embargo si hubiese en realidad un tiroteo con potentes armas de fuego, los “pobres” soldados tendrían menos protección, gracias a que no llevan sus cascos de acero…. Independientemente de que supongo, que como siempre, las balas del criminal si matan, mientras que las balas del ejército a lo mejor no dan en el blanco.
Pero el verdadero problema en México radica en el hecho, de que HAY UNA DECLARACION DE GUERRA, Y SIGUEN REGIENDO LAS LEYES CIVILES Y LA LEY DE LOS DERECHOS HUMANOS
Resulta de esta manera, que un soldado en estado de guerra, no puede matar a un narcotraficante impunemente, ya que tanto el ministerio público, como la Organización de Derechos Humanos ponen el grito en el cielo, y el pobre cabo o sargento tendría que enfrentar un juicio civil, para alegar defensa propia, porque un huarachudo con una metralleta de grueso calibre lo atacó, con intenciones de matar.
Finalmente quiero mencionar, que en el canal “Proyecto 40” de la TV, acabo de ver un reporte sobre el ejército mexicano muy interesante. Pero en uno de sus capítulos muestran un SIMULACRO DE COMBATE de una emboscada que le tendieron los narcotraficantes.
Obviamente todo estaba perfectamente programado y cada uno de los elementos tanto del ejército, como del “enemigo” sabían de antemano lo que había que hacer, y como en un foro de un teatro, todo acabó de maravilla.
Pero en todo ese escenario, me llamó poderosamente la atención, de que ninguno de los soldados llevaba casco de acero sino que cómodamente llevaban sus gorras de visera. … al fin que todo era “de a mentiras” ni nadie tiraba con munición “de a de veras”.
De paso sea dicho, yo nunca supe de que el ejercito mexicano haya hecho MANIOBRAS … por lo regular entre “rojos” y “azules” con todo el equipo de guerra, con la única diferencia, de que las municiones trazadoras en lugar de proyectiles mortales disparan cápsulas de color, marcando así el acierto o el “fuera de combate”….y que ninguno de los dos bandos sabe lo que hará el otro.
ASI ES COMO VERDADERAMENTE SE CAPACITA UN EJERCITO
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