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¡Fín de la farsa, adiós al PRD!

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  • ¡Fín de la farsa, adiós al PRD!

    Navarrete grita: “¡Ganamos!”; Rosa Albina renuncia al partido
    La gran derrota, la destrucción del referente amarillo
    Es muy probable que de manera simultánea a que el senador Carlos Navarrete anunciara desde Xicoténcatl 9 el fin del asalto al Congreso —que con un rostro más de funeral que de éxito alardeara un nada convincente: “¡Ganamos!”— no muy lejos de ahí la ex guerrillera, ex perredista por dos décadas y conciencia crítica de los amarillos, Rosa Albina Garavito, haya concluido la redacción de su texto de renuncia al PRD.
    El fuerte contraste entre los dos acontecimientos de los que hablamos —el primero, retrato fiel de una mascarada que en los extremos del cinismo y lo grotesco quiere ser presentada como un triunfo y, el segundo, como símbolo de la tragedia que en el fondo vive el sistema de partidos y, sobre todo, la llamada izquierda— nos enseñan el tamaño de la crisis que vive no el PRD, no el legítimo y sus desplantes locuaces, no un gobierno pautado por las incapacidades, sino la democracia mexicana. La crisis que vemos y que padecemos nos enseña, además, lo cerca que estamos de los embates antidemocráticos. Por eso las interrogantes básicas.

    ¿Realmente existe un político, un intelectual, un periodista, militante, simpatizante de la izquierda, de lo que era el PRD, que crea que es un triunfo la denigración política a la que fueron sometidos los amarillos en los días previos?
    Con un mínimo de sensatez, de lucidez, de sinceridad —sin la pasión que nubla la razón— ¿existe de verdad alguna persona que crea que a eso que vimos en los días pasados, el asalto al Congreso por parte de un mesías que somete a diputados y senadores amarillos, puede ser llamado triunfo? No lo creemos, pero respetamos lo que otros crean.

    Sin embargo, sí creemos que al poner fin a la farsa del asalto al Congreso, los amarillos también quitaron el velo que cubría lo que hay en el fondo; la destrucción del PRD, de ese proyecto histórico y ejemplo en el mundo; la demolición del más fuerte partido que haya conocido la izquierda mexicana, la desaparición de la alternativa histórica que tuvieron, tuvimos millones de electores que podíamos votar por un tercero confiable, además del PRI y del PAN.

    En efecto, “el pastor” del “rebaño legislativo” de los amarillos pudo haber ganado tiempo, pudo haber convertido el debate petrolero en mera vacilada para su causa personalísima, pudo haberse creído el Luis XIV de Macuspana, pero en el fondo esas ambiciones sin límite también “se cargaron” al PRD. Y si alguien sabe de eso, es Rosa Albina Garavito, mujer que en los años de la antidemocracia y la represión se fue a la guerrilla y que hoy, ante la simulación y la antidemocracia, se va del PRD.

    ¿No que no?
    Hace casi un año, cuando en el Itinerario Político del 28 de mayo de 2007 señalamos que partir de la reconstrucción de una pelea verbal entre AMLO y Carlos Navarrete el tema petrolero terminaría en una farsa de AMLO —quien ya entonces había dicho lo que hoy todos saben gracias a una grabación— fueron muchos los que prefirieron mantener los ojos cerrados a la realidad —quienes incluso nos insultaron con recargados epítetos— a pesar de que se demostró que a López Obrador lo último que le importaba era salvar Pemex, la industria petrolera y que la privatización —que él mismo propuso en su programa de gobierno—, era una salida nada cuestionable. Y claro, se demostró que tampoco le importaba el interés de las mayorías.
    Eso sí, dijimos que a partir de los testimonios del propio AMLO, lo que le importaba era usar la reforma petrolera del gobierno de Calderón para regresar al centro del debate; montar su campaña presidencial rumbo al 2012 en la supuesta defensa del petróleo y contra la reforma de Calderón y, al mismo tiempo, cobrar venganza contra Calderón y los que, en su delirio tropical, le arrebataron el poder.
    En ese delirio de poder, que está a los ojos de todos, lo más importante era derribar al gobierno de Calderón —para lo que era necesario bombardear su gestión desde todos los ángulos—, en tanto que el tabasqueño, como el “Rey Bichi” se desnudaba frente a todos.

    Sí, ante la contundencia de los hechos, López Obrador se dijo a sí mismo dueño y esencia del “movimiento” y dueño del poder “legítimo”. Algo así como la versión tropical de Luis XIV quien, semejante ignorancia la nuestra, nació nada menos que en Macuspana. Hace un año revelamos que AMLO les advirtió a sus subordinados del FAP y del PRD que no permitiría nada que beneficiara al “espurio”. Claro, el tema petrolero no era más que una carnada para engordar sus ambiciones, porque la solución real de ese conflicto debía esperar, porque él, el moderno Luis XIV tropical, lo resolvería cuando fuera presidente.

    ¿Dónde están todos los que nos insultaron? ¿Dónde están todos los que negaron que AMLO pretendía vengarse de Calderón...? Sí, calladitos se ven más bonitos. Se acabaron los argumentos de la farsa.

    El fin del PRD
    Pero regresamos al tema apenas en el ItinerarioPolítico del pasado 16 de abril, cuando insistimos en que el asalto al Congreso no era más que una estrategia perversa de AMLO para “reventar” al gobierno de Calderón. En esa fecha dijimos que cualquiera que fuera la propuesta petrolera del gobierno —incluso si Calderón se “fusilaba” la de AMLO—, ésta sería rechazada por el PRD y el FAP. ¿Por qué? Porque para el tabasqueño lo que importa es otra cosa; le importa el poder a secas, y llegar a él por los medios que sea.
    De nueva cuenta criticamos a las llamadas “mentes brillantes” que, igual que muchos liderazgos políticos, habían sido sometidas a las ideas, las opiniones, las necedades y ocurrencias de un solo hombre; sometidos por un mesías que más bien parecía un “pastor”, mientras que sus leales no eran más que “el rebaño”. Un mesías delirante y autoritario para quien lo menos importante era Pemex, el debate petrolero, la democracia y la estabilidad nacional. Para AMLO la política, las instituciones, la democracia y el debate petrolero no son más que “una vacilada”. Y usa a sus “intelectuales orgánicos” para engañar bobos, entre otros, a ellos mismos.
    La inteligencia no se mide por el IQ, sino por la capacidad que se tiene para entender a los demás.

  • #2
    Re: ¡Fín de la farsa, adiós al PRD!

    2a. Parte.

    Como quedó demostrado en las recientes grabaciones de las peleas de AMLO y Carlos Navarrete —bueno, en el extremo del absurdo existen quienes incluso dicen que el Cisen espió a AMLO, cuando ya se sabe que los reporteros husmearon de más— para el legítimo el debate sobre Pemex es una vacilada, para AMLO no hay más partido y más movimiento que él mismo —Luis XIV de Macuspana— y no le importa ni el Congreso, menos las instituciones, tampoco la política, la ética, la congruencia y está en el limbo esa vieja demanda de la izquierda mexicana que era la independencia de los congresistas. AMLO es más que el espíritu santo; él es Dios. Y sus intelectuales orgánicos lo adoran como tal.

    Según la grabación de marras, AMLO propone engañar a los políticos de los otros partidos, pero también a los ciudadanos. Se da el lujo de gritar: “¡Ya les dije lo que quiero!”, en un desplante que recuerda no sólo el autoritarismo, mesianismo, fascismo, sino la regresión grosera y nada democrática a los controles que ejercían los presidentes del viejo PRI entre senadores y diputados del tricolor. La manipulación, y el borreguismo que imponían en sus tiempos los presidentes del PRI sobre diputados y senadores del tricolor, se quedan en mero juego de niños frente a la grosera e insultante manipulación de los congresistas del PRD por parte de AMLO.

    ¿Cuántos de los llamados “intelectuales” —que en el absurdo dicen haber ganado gracias al sometimiento de que son víctima— que a ciegas y sordas apoyan al moderno tirano, cuestionaron hace décadas la misma tiranía de Gustavo Díaz Ordaz, Echeverría, López Portillo, Salinas...? ¿Ese, el nuevo engendro del PRI es un político confiable? ¿Es un demócrata? ¿Qué AMLO no es igual a Díaz Ordaz, a Echeverría, a López Portillo...?

    Se desgrana la mazorca
    Nos guste o no, vivimos el fin del PRD, en tanto partido político alternativo a los dos extremos de la derecha —la del PAN y la del PRI— y al mismo tiempo presenciamos el regreso, la reconstrucción de lo más cuestionable del viejo PRI, bazofia que colonizó y sometió a los amarillos. Y a esa destrucción han servido las “mentes brillantes” acríticas del moderno tiranuelo.
    Pero contra lo que está ocurriendo en una cada vez más amplia gama de ciudadanos —que abren los ojos y se niegan a seguir al fascista con disfraz de redentor—, contra ese maloliente conservadurismo mostrado por un sector de pensantes orgánicos sometidos a AMLO y alejados a la razón y la sensatez —y luego de las más recientes grabaciones que confirman al legítimo como un farsante de la política—, muchos de los de a pie parecen ver que AMLO no es precisamente el mejor modelo de un político honesto, sino que no habla con verdad, no es congruente y menos un demócrata. Cada vez son más los que creen y se convencen de que AMLO es el responsable de la destrucción del PRD, eso que en su momento fue la mayor aportación de la izquierda mexicana a la vida democrática del país.

    Y los de a pie, en México y casi todo el mundo, son o somos lo de menos, porque nos han enseñado que lo importante es lo que dicen, piensan y hacen los hombres de poder, sean intelectuales o políticos. Aún así, existen casos de ciudadanos y ciudadanas que mantienen vivos los anticuerpos que los llevaron a la lucha social hace décadas, y cuyos anticuerpos están vivos, reaccionan cuando deben reaccionar frente a los peligros que marcan el regreso del viejo PRI.

    Sí, en tanto Carlos Navarrete cantaba el “¡Ganamos!”, en el que nadie creyó, Rosa Albina Garavito colocaba el punto final a su renuncia del PRD. ¿Por qué se va la ex guerrillera y valiente luchadora social del PRD? ¿Por qué no, en congruencia, muchos otros le dan la espalda a un partido y un liderazgo fantasma, que es lo peor de aquellos contra lo que luchó el PRD y la izquierda amarilla?

    La primera respuesta, a la renuncia de Rosa Albina Garavito al PRD, se responde con una palabra: congruencia. Acaso tardía, pero real y contundente al final de cuentas. La respuesta a la segunda interrogante puede resultar dolorosa. Muchos no se van del PRD porque traicionaron sus ideales, su historia, se traicionaron ellos mismos y a la izquierda mexicana. Muchos de ellos son vulgares vividores de la política, que por años gritaron contra los crímenes del PRI y hoy, acurrucados en un poder idéntico, ya ni se acuerdan.

    La renuncia
    Dice Rosa Albina Garavito en su carta de renuncia al PRD: “Mientras el PRD ha perdido autoridad moral para ser el referente de izquierda, la derecha de dos cabezas: el PRI y el PAN, sigue cavando la inviabilidad del país con sus políticas de concentración de riqueza, privatización, expropiación... He sostenido que para detener ese proyecto depredador (en cuyo ciclo sólo faltan las reformas energética y laboral) y dar un nuevo rumbo al país, no son suficientes los liderazgos carismáticos que terminan siempre en caudillos; tampoco la movilización social.
    Se requiere una sólida y confiable organización de izquierda, moderna y democrática. El PRD no lo es, no quiso serlo, o no pudo serlo... somos testigos de su extinción (la del PRD), como referente de izquierda”.
    Y la historia colocará a AMLO como el verdugo de esa izquierda que no fue. Un proyecto de muchos hombres, vidas, destruido por las ambiciones de un solo hombre. Pero somos más. Al tiempo. aleman2@prodigy.net

    Ver nota-
    La inteligencia no se mide por el IQ, sino por la capacidad que se tiene para entender a los demás.

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    • #3
      Re: ¡Fín de la farsa, adiós al PRD!

      La izquierda tanto como la derecha, no existen

      Tan sólo hay unos hipócritas que quieren el poder para enriquecerse, ostentándose como defensores de los jodidos;

      Los otros PAN y PRI nada más son cínicos; ellos no defienden a los pobres, ni a nadie en particular más que a ellos mismos, también quieren el botín.


      Saludos.
      Desde que + conozco la anturaleza humana, + quiero a los tigres del zoologico de chapultepec ( o de cualquier otro lado pa´l caso)
      Rafael Norma
      Forista Turquesa
      Last edited by Rafael Norma; 28-abril-2008, 08:44.

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