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FONATUR ha decidido invertir $ 5,000.00 millones de pesos en el rancho del exgobernador del estado de Sinaloa, Don Antonio Toledo Corro. Costumbre arrigada de FONATUR de invertir en terrenos que han sido por años propìedad de políticos o de reciente adquisición por políticos, con un jugoso beneficio para los propietarios del terreno. Es un vicio de décadas.
El secretario de Turismo afirma que no importa de quien sean los terrenos (que ingenuidad -la del pueblo en creerles-, los Gobernadores de los Estados y otros políticos influyen para que se determine en donde se hara la inversión, son los que llevan a enseñar los terrenos y pasean a los inversionistas en helicóptero por donde les conviene A ELLOS), pero que casualmente, son propiedad de algún político (que muchas veces subrepticiamente esta asociado con el gobernador en turno, el cual también seguramente obtendrá un secreto y silencioso beneficio). Que casualmente las inversiones que ha hecho FONATUR por décadas las ha hecho en propiedades de políticos. Algunos mas descarados, en terrenos de reciente adquisición, en los que el político o los políticos adquieren los terrenos justo antes de que FONATUR decida hacer el proyecto en dichas propiedades.
Además que es la labor de FONATUR beneficiar a dichos centros, y no a los destinos tradicionales, que tan necesitados estan de recursos, ahí tenemos a Mazatlán a unos cuantos kilometros (+/- 60 km), tradicionalmente abandonado por el gobierno, en beneficio del "Nuevo Cancún", como tienen el descaro de llamarlo. Que se rumora por cierto que Cancún fué una inversión que benefició escandalosamente a un poítico poderoso, igual que Bahías de Huatulco y otras.
Lo correcto sería cerrar FONATUR, que constituye un gasto superfluo para el pueblo de México, denota el gobierno de la república una falta de sensibilidad, de sencillez y humildad, que debe caracterizar a las políticas de un país con un pueblo tan pobre como lo es el de México, que gran cantidad de la población se ve en apuros para hacerse llegar el pan de cada día, y se ve forzada a cubrir al herario público sus excentricidades, precio de hambre.
El secretario de Turismo afirma que no importa de quien sean los terrenos (que ingenuidad -la del pueblo en creerles-, los Gobernadores de los Estados y otros políticos influyen para que se determine en donde se hara la inversión, son los que llevan a enseñar los terrenos y pasean a los inversionistas en helicóptero por donde les conviene A ELLOS), pero que casualmente, son propiedad de algún político (que muchas veces subrepticiamente esta asociado con el gobernador en turno, el cual también seguramente obtendrá un secreto y silencioso beneficio). Que casualmente las inversiones que ha hecho FONATUR por décadas las ha hecho en propiedades de políticos. Algunos mas descarados, en terrenos de reciente adquisición, en los que el político o los políticos adquieren los terrenos justo antes de que FONATUR decida hacer el proyecto en dichas propiedades.
Además que es la labor de FONATUR beneficiar a dichos centros, y no a los destinos tradicionales, que tan necesitados estan de recursos, ahí tenemos a Mazatlán a unos cuantos kilometros (+/- 60 km), tradicionalmente abandonado por el gobierno, en beneficio del "Nuevo Cancún", como tienen el descaro de llamarlo. Que se rumora por cierto que Cancún fué una inversión que benefició escandalosamente a un poítico poderoso, igual que Bahías de Huatulco y otras.
Lo correcto sería cerrar FONATUR, que constituye un gasto superfluo para el pueblo de México, denota el gobierno de la república una falta de sensibilidad, de sencillez y humildad, que debe caracterizar a las políticas de un país con un pueblo tan pobre como lo es el de México, que gran cantidad de la población se ve en apuros para hacerse llegar el pan de cada día, y se ve forzada a cubrir al herario público sus excentricidades, precio de hambre.