EL ABC y Felipillo no te hagas pendejo
Politica Cero
por Jairo Calixto Albarrán.
Ya no digamos por interés humano, o cualquier forma de vocación justiciera, que se ve que no es lo suyo, sino por estrategia política, CaldeRON tendría que asegurarse que el proyecto de dictamen del magistrado Arturo Zaldívar que señala a Molinar Horcasitas, Eduardo Bours y Daniel Karam, los three amigos de la abulia burocrática, como virtuales responsables de la tragedia en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora, llegue a puerto seguro. Sobre todo ahora que sus niveles de popularidad descienden de manera proporcional a la cantidad de matazones, descabezados e inoperancias de su melifluo aparato de seguridad, cuyo nivel de talento para el control de daños es sólo comparable con el de la British Petroleum en el golfo de México (recuperaron la mitad del crudo derramado, pero ni un ápice del ecosistema). Más aún si pensamos que los atorrantes y sobraditos priistas ya están afuera de Los Pinos cual maestros de la CNTE dándole de madrazos a la puerta centenaria de la SEP (tan patéticos los lamentos de Lujambio que ha dejado que el problema se haya desparramado en tales niveles de putrefacción, como las justificaciones de los luchadores magisteriales que ahora deben estar planeando irse a mear donde está Tláloc), mientras La Gaviota está tomando medidas para armar su set telenovelero en el armario donde Margarita Zavala tiene a buen resguardo su rebozos y pashminas.
Si bien el calderonismo trae al chuchismo por ilustrar vuelto loco con el incierto destino de Greg Sánchez (ya se vio que lo suyo, lo suyo, lo suyo es el michoacanazo barbajanesco), al PRI nomás no lo puede controlar ahora que anda como marrana sin mecate. Por un lado Matrix Paredes, que ya se siente la nueva Corregidora, y Gelboy Peñanieto quien habla para la posteridad mientras el Edomex…
Digo, a menos que Jelipillo haya claudicado y tenga ganas de ser recordado como una mala copia de Fox y sparring de don Beltrone, tendría que aferrarse al caso ABC como a un clavo ardiente. Si sacrifica a Karam, Molinar y Bours, condenándolos jurídicamente a ser los antihéroes de la rubrogación, quizá se lleve palmas, orejas, rabo y algo de la fe perdida.
Antes de irse felizmente a zambullirse en la orgía panbolera a Sudáfrica y salar a los ratones verdes con la bendición de Norbeto Rivera, Jelipillo bien puede tomar un puñado de decisiones espectaculares y mandar al eje Karam-Molinar-Bours aunque sea a una cárcel de mínima seguridad, como en donde despacha Caro Quintero o en la que reorganiza sus danzas padremacielescas, Succar Kuri. Si no es por devoción, que sea por conveniencia.
¡Ay Jelipillo no te rajes!
jairo.calixto@milenio.com
Politica Cero
por Jairo Calixto Albarrán.
Ya no digamos por interés humano, o cualquier forma de vocación justiciera, que se ve que no es lo suyo, sino por estrategia política, CaldeRON tendría que asegurarse que el proyecto de dictamen del magistrado Arturo Zaldívar que señala a Molinar Horcasitas, Eduardo Bours y Daniel Karam, los three amigos de la abulia burocrática, como virtuales responsables de la tragedia en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora, llegue a puerto seguro. Sobre todo ahora que sus niveles de popularidad descienden de manera proporcional a la cantidad de matazones, descabezados e inoperancias de su melifluo aparato de seguridad, cuyo nivel de talento para el control de daños es sólo comparable con el de la British Petroleum en el golfo de México (recuperaron la mitad del crudo derramado, pero ni un ápice del ecosistema). Más aún si pensamos que los atorrantes y sobraditos priistas ya están afuera de Los Pinos cual maestros de la CNTE dándole de madrazos a la puerta centenaria de la SEP (tan patéticos los lamentos de Lujambio que ha dejado que el problema se haya desparramado en tales niveles de putrefacción, como las justificaciones de los luchadores magisteriales que ahora deben estar planeando irse a mear donde está Tláloc), mientras La Gaviota está tomando medidas para armar su set telenovelero en el armario donde Margarita Zavala tiene a buen resguardo su rebozos y pashminas.
Si bien el calderonismo trae al chuchismo por ilustrar vuelto loco con el incierto destino de Greg Sánchez (ya se vio que lo suyo, lo suyo, lo suyo es el michoacanazo barbajanesco), al PRI nomás no lo puede controlar ahora que anda como marrana sin mecate. Por un lado Matrix Paredes, que ya se siente la nueva Corregidora, y Gelboy Peñanieto quien habla para la posteridad mientras el Edomex…
Digo, a menos que Jelipillo haya claudicado y tenga ganas de ser recordado como una mala copia de Fox y sparring de don Beltrone, tendría que aferrarse al caso ABC como a un clavo ardiente. Si sacrifica a Karam, Molinar y Bours, condenándolos jurídicamente a ser los antihéroes de la rubrogación, quizá se lleve palmas, orejas, rabo y algo de la fe perdida.
Antes de irse felizmente a zambullirse en la orgía panbolera a Sudáfrica y salar a los ratones verdes con la bendición de Norbeto Rivera, Jelipillo bien puede tomar un puñado de decisiones espectaculares y mandar al eje Karam-Molinar-Bours aunque sea a una cárcel de mínima seguridad, como en donde despacha Caro Quintero o en la que reorganiza sus danzas padremacielescas, Succar Kuri. Si no es por devoción, que sea por conveniencia.
¡Ay Jelipillo no te rajes!
jairo.calixto@milenio.com