Wall Street sufre la mayor caída desde el 11-S tras la quiebra de Lehman Brothers
Wall Street ha sufrido la mayor caída de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. La ola de pérdidas que se ha llevado por delante a las Bolsas asiáticas y europeas ha azotado también con fuerza al corazón financiero de Nueva York en una jornada negra marcada para la Historia por la quiebra de Lehman Brothers, el cuarto banco de inversión del país, y la adquisición de Merrill Lynch por parte de Bank of America a precio de ganga.
El Dow Jones, el principal indicador del parqué neoyorquino, se dejó un 4,42% (504,48 puntos) y Standard & Poor's 500 cayó un 4,64% (58,06 puntos). Son las peores caídas desde los atentados del 11 de septiembre de 2001. Mientras, el Nasdaq, perdió un 3,60%.
Los inversores han visto despejada parte de la incertidumbre de la jornada en la recta final, tras anunciarse que la aseguradora American International Group había obtenido un permiso especial del Estado de Nueva York para acceder a 20.000 millones de dólares de capital en manos de sus filiales. La aseguradora había acudido a la Fed en busca de un crédito por valor de 40.000 millones para enfrentar la depreciación de sus activos como consecuencia de la crisis de las hipotecas de alto riesgo que dura ya 13 meses.
No obstante, la negativa del Gobierno estadounidense a intervenir en la quiebra de Lehman Brothers, tal y como hizo hace una semana para salvar a las dos mayores hipotecarias del país, Fannie Mae y Freddie Mac, ha encendido las alarmas en el sector financiero.
Diez de los principales bancos del mundo, entre los que se encuentra el propio Bank of America, se han asociado para crear un fondo para enfrentar los problemas de liquidez.
Mientras, al otro lado del Atlántico, el Banco Central Europeo realizaba una inyección de 30.000 millones de euros que no ha cumplido su objetivo de aliviar las pérdidas superiores al 4% de los mercados del continente.
El secretario del Tesoro de EEUU, Henry Paulson, ha defendido la decisión de su Gobierno de permitir la bancarrota del banco de inversión Lehman Brothers, pero sin descartar que en el futuro pueda intervenir para evitar otras quiebras. "No me tomo a la ligera arriesgar el dinero público", ha concluido.
Por su parte, el presidente de EEUU, George W. Bush, ha dicho que las autoridades económicas federales se centrarán a la hora de tomar medidas "en la salud del sistema financiero como un todo", y ha añadido que tiene confianza en que "los mercados de capital son flexibles y robustos y pueden hacer frente a los ajustes".
Wall Street ha sufrido la mayor caída de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. La ola de pérdidas que se ha llevado por delante a las Bolsas asiáticas y europeas ha azotado también con fuerza al corazón financiero de Nueva York en una jornada negra marcada para la Historia por la quiebra de Lehman Brothers, el cuarto banco de inversión del país, y la adquisición de Merrill Lynch por parte de Bank of America a precio de ganga.
El Dow Jones, el principal indicador del parqué neoyorquino, se dejó un 4,42% (504,48 puntos) y Standard & Poor's 500 cayó un 4,64% (58,06 puntos). Son las peores caídas desde los atentados del 11 de septiembre de 2001. Mientras, el Nasdaq, perdió un 3,60%.
Los inversores han visto despejada parte de la incertidumbre de la jornada en la recta final, tras anunciarse que la aseguradora American International Group había obtenido un permiso especial del Estado de Nueva York para acceder a 20.000 millones de dólares de capital en manos de sus filiales. La aseguradora había acudido a la Fed en busca de un crédito por valor de 40.000 millones para enfrentar la depreciación de sus activos como consecuencia de la crisis de las hipotecas de alto riesgo que dura ya 13 meses.
No obstante, la negativa del Gobierno estadounidense a intervenir en la quiebra de Lehman Brothers, tal y como hizo hace una semana para salvar a las dos mayores hipotecarias del país, Fannie Mae y Freddie Mac, ha encendido las alarmas en el sector financiero.
Diez de los principales bancos del mundo, entre los que se encuentra el propio Bank of America, se han asociado para crear un fondo para enfrentar los problemas de liquidez.
Mientras, al otro lado del Atlántico, el Banco Central Europeo realizaba una inyección de 30.000 millones de euros que no ha cumplido su objetivo de aliviar las pérdidas superiores al 4% de los mercados del continente.
El secretario del Tesoro de EEUU, Henry Paulson, ha defendido la decisión de su Gobierno de permitir la bancarrota del banco de inversión Lehman Brothers, pero sin descartar que en el futuro pueda intervenir para evitar otras quiebras. "No me tomo a la ligera arriesgar el dinero público", ha concluido.
Por su parte, el presidente de EEUU, George W. Bush, ha dicho que las autoridades económicas federales se centrarán a la hora de tomar medidas "en la salud del sistema financiero como un todo", y ha añadido que tiene confianza en que "los mercados de capital son flexibles y robustos y pueden hacer frente a los ajustes".
Comment