Según Transparencia Internacional, México cayó del lugar 72 al 89 en la percepción de corrupción. Lo anterior nos sitúa por abajo de países como Guatemala y El Salvador, Perú y Colombia, y nos deja muy lejos de Chile, Uruguay y Costa Rica.
De acuerdo con la evaluación realizada por el organismo citado: “La puntuación baja refleja que las instituciones débiles, las prácticas de gobernabilidad deficientes y la excesiva injerencia de los intereses privados continúan frustrando iniciativas tendientes a promover un desarrollo equitativo y sostenible”.
Se informó que los países menos corruptos poseen una adecuada "estabilidad política, y tienen normativas fuertemente establecidas sobre conflictos de interés, así como instituciones públicas sólidas y efectivas”. En este bloque están Nueva Zelanda, Dinamarca, y Singapur. México está básicamente 7 puntos porcentuales por debajo de ellos.
Esto viene a colación porque el enano requisador anunció durante meses y meses de campaña, que él sí tenía las manos limpias, que así las iba a mantener, y que su gobierno sería puro jauja con el aniquilamiento de la corrupción, para que la familia viviera mejor.
Éso lo dijo, además, cuando ya se había autorizado un crédito en Banobras al que NO tenía derecho, por lo cual su demagogia ya era patente desde el inicio, pero, entendiendo ahora que el chaparrito tiene los valores invertidos, es posible que lo que haya querido decir (gracias Rubén Aguilar), es que manos limpias equivalen a corrupción indetenible. La muestra es que en un año bajamos 12 lugares en la evaluación respectiva.
No nada mas hay corrupción en el gobierno federal, desde luego, pero ¿en dónde se da más?
De acuerdo con la evaluación realizada por el organismo citado: “La puntuación baja refleja que las instituciones débiles, las prácticas de gobernabilidad deficientes y la excesiva injerencia de los intereses privados continúan frustrando iniciativas tendientes a promover un desarrollo equitativo y sostenible”.
Se informó que los países menos corruptos poseen una adecuada "estabilidad política, y tienen normativas fuertemente establecidas sobre conflictos de interés, así como instituciones públicas sólidas y efectivas”. En este bloque están Nueva Zelanda, Dinamarca, y Singapur. México está básicamente 7 puntos porcentuales por debajo de ellos.
Esto viene a colación porque el enano requisador anunció durante meses y meses de campaña, que él sí tenía las manos limpias, que así las iba a mantener, y que su gobierno sería puro jauja con el aniquilamiento de la corrupción, para que la familia viviera mejor.
Éso lo dijo, además, cuando ya se había autorizado un crédito en Banobras al que NO tenía derecho, por lo cual su demagogia ya era patente desde el inicio, pero, entendiendo ahora que el chaparrito tiene los valores invertidos, es posible que lo que haya querido decir (gracias Rubén Aguilar), es que manos limpias equivalen a corrupción indetenible. La muestra es que en un año bajamos 12 lugares en la evaluación respectiva.
No nada mas hay corrupción en el gobierno federal, desde luego, pero ¿en dónde se da más?
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