Al autor de estas lÃneas le sucedió ayer lo que a la mayorÃa de incautos y convenencieros a quienes Andrés Manuel López Obrador viene tomándoles el pelo desde que traicionó el lema sobre el que construyó su imagen, el de la “honestidad valienteâ€: le creyó la mentira (una más en su perlario) de que la estrategia para su nuevo asalto a la razón (y contra la democracia), el que disfraza de “movimiento patrióticoâ€, se diseñarÃa después de que sus compinches hicieran un “planteamiento†en el Senado.
Pero sus adictos, al dÃa siguiente, convirtieron en Bürgerbräukeller (la histórica cervecerÃa de Munich) los salones de sesiones del Congreso, para dejar claro que no sólo se oponen a la revitalización de Pemex, sino que les aterra la simple discusión del tema.
Los pejefundamentalistas hicieron lo mismo que los nazifascistas (jueves 8 de noviembre de 1923), cuando los camisas pardas abortaron un sosegado mitin polÃtico mientras un fanático, Adolfo Hitler, echaba tiros de pistola y alardeaba: “¡Acaba de iniciarse una revolución…!â€.

milenio del dia de hoy. (11 abril 08)
Pero sus adictos, al dÃa siguiente, convirtieron en Bürgerbräukeller (la histórica cervecerÃa de Munich) los salones de sesiones del Congreso, para dejar claro que no sólo se oponen a la revitalización de Pemex, sino que les aterra la simple discusión del tema.
Los pejefundamentalistas hicieron lo mismo que los nazifascistas (jueves 8 de noviembre de 1923), cuando los camisas pardas abortaron un sosegado mitin polÃtico mientras un fanático, Adolfo Hitler, echaba tiros de pistola y alardeaba: “¡Acaba de iniciarse una revolución…!â€.

milenio del dia de hoy. (11 abril 08)
Comment