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Ora consecencia de "la Guerrita" de Li"pillo"
Los maestros dicen 
"Ya basta” ante las extorsiones de las bandas de narcotraficantes
publicado por The New York Times,
Traducido por Rafael Norma Mendez
Los maestros marcharon el 14 de septiembre de 2011 en Acapulco para protestar por los intentos de extorsión que han llevado al cierre a decenas de escuelas públicas.
ACAPULCO, México — El mensaje se entrega por una llamada telefónica a la oficina de una escuela, un fajo de papeles fotocopiados dejado en otra, una pancarta colgada frente a una tercera.
La violencia en México ha tocado incluso a las escuelas primarias. En Ciudad Juárez, un hombre tirado en el piso, fue asesinado por hombres armados que dispararon contra una multitud.
La demanda es la misma: los maestros tienen hasta el 1 de octubre para que comiencen a entregar más de la mitad de su salario. Si no lo hacen, corren riesgo sus vidas.
La extorsión es una industria en auge en México, con los casos denunciados de haberse casi triplicado desde 2004. Para algunos analistas, es una consecuencia no deseada de la estrategia del gobierno en la guerra contra las drogas: al astillar a grandes carteles, los ejércitos de matones callejeros escolarizados en amenazas y violencia han traído sus nuevas aptitudes a sus nuevas empresas.
Pero la amenaza a los profesores aquí en este centro turístico ha empañado la práctica a un nuevo nivel. Puesto que las amenazas anónimas comenzaron el mes pasado, cuando los estudiantes regresaron a clases después de las vacaciones de verano, cientos de escuelas han cerrado.
"No se trata de dinero, se trata de vida o muerte", dijo Alejandro Estrada, un maestro de escuela primaria, que ya marchó en una protesta con miles de otros profesores por paseo marítimo de Acapulco la semana pasada. "Si no pagas, te mueres."
La palabra aquí, en los barrios difíciles que se extienden por las montañas que rodean la alguna vez espléndida bahía de Acapulco, es que todo el mundo está pagando dinero de protección: médicos, conductores de taxi, las tiendas locales.
"Vienen todas las semanas, y que acaba de pagar, porque nunca se sabe", susurró una vendedora de flores en el mercado Emiliano Zapata, una sección de la ciudad donde las tiendas y la escuelas están cerradas, dando testimonio del terror.
"Todo el mundo piensa que son asesinos a sueldo en estos días", añadió, negándose a dar su nombre por temor a que las personas que les paga menos de 20 dólares a la semana, descubran que ella haya hablado.
Pero a diferencia de otros grupos, que parecen estar sufriendo en silencio, los profesores pertenecen a un sindicato poderoso que puede convocar a un gran número de protestas. Y en el último mes, las huelgas se han extendido a las escuelas que no han recibido ninguna amenaza, que cerraron por solidaridad o temor.
"Todos tenemos miedo", dijo un profesor de la escuela de dibujo de secundaria que quiso dar su nombre sólo como[b] Noemi. "Somos el banco [de la extorsión], porque tenemos un salario que es un poco más estable que el resto."
A escala nacional, el aumento de la extorsión fue arrancada del doloroso enfoque el mes pasado, después de que presuntos hombres que trabajan para el cartel de los Zetas incendiaron un casino en la norteña ciudad de Monterrey, matando a cuando menos 52 personas que se encontraban en su interior- Los funcionarios estatales dijeron que los propietarios se negaron a pagar la cuota de piso que aumentaron los Zetas Mientras poderosas organizaciones criminales como los Zetas han hecho desde hace mucho tiempo la extorsión su tarjeta de presentación, y desde entonces han tomado a la vida como de su propiedad.
Desde que hace cinco largos años Lipillo campaña contra los carteles de la droga, la estrategia gubernamental ha ido enfocar los recursos sobre los grandes líderes ( excepto el Joaquín, Chapo Guzmán ) y fracturar a las grandes organizaciones en grupos más pequeños. Pero cuando alas bandas violentas se les quitan sus jefes, que saben como mover la droga hacia los Estados Unidos de Amnesia, o se les saca de las tradicionales rutas de trasiego de las drogas, buscan nuevas líneas de “trabajo” y según los expertos, la extorsión es la menos arriesgada.
continuará....
"Ya basta” ante las extorsiones de las bandas de narcotraficantespublicado por The New York Times,
Traducido por Rafael Norma Mendez
Los maestros marcharon el 14 de septiembre de 2011 en Acapulco para protestar por los intentos de extorsión que han llevado al cierre a decenas de escuelas públicas.
ACAPULCO, México — El mensaje se entrega por una llamada telefónica a la oficina de una escuela, un fajo de papeles fotocopiados dejado en otra, una pancarta colgada frente a una tercera.
La violencia en México ha tocado incluso a las escuelas primarias. En Ciudad Juárez, un hombre tirado en el piso, fue asesinado por hombres armados que dispararon contra una multitud.
La demanda es la misma: los maestros tienen hasta el 1 de octubre para que comiencen a entregar más de la mitad de su salario. Si no lo hacen, corren riesgo sus vidas.
La extorsión es una industria en auge en México, con los casos denunciados de haberse casi triplicado desde 2004. Para algunos analistas, es una consecuencia no deseada de la estrategia del gobierno en la guerra contra las drogas: al astillar a grandes carteles, los ejércitos de matones callejeros escolarizados en amenazas y violencia han traído sus nuevas aptitudes a sus nuevas empresas.
Pero la amenaza a los profesores aquí en este centro turístico ha empañado la práctica a un nuevo nivel. Puesto que las amenazas anónimas comenzaron el mes pasado, cuando los estudiantes regresaron a clases después de las vacaciones de verano, cientos de escuelas han cerrado.
"No se trata de dinero, se trata de vida o muerte", dijo Alejandro Estrada, un maestro de escuela primaria, que ya marchó en una protesta con miles de otros profesores por paseo marítimo de Acapulco la semana pasada. "Si no pagas, te mueres."
La palabra aquí, en los barrios difíciles que se extienden por las montañas que rodean la alguna vez espléndida bahía de Acapulco, es que todo el mundo está pagando dinero de protección: médicos, conductores de taxi, las tiendas locales.
"Vienen todas las semanas, y que acaba de pagar, porque nunca se sabe", susurró una vendedora de flores en el mercado Emiliano Zapata, una sección de la ciudad donde las tiendas y la escuelas están cerradas, dando testimonio del terror.
"Todo el mundo piensa que son asesinos a sueldo en estos días", añadió, negándose a dar su nombre por temor a que las personas que les paga menos de 20 dólares a la semana, descubran que ella haya hablado.
Pero a diferencia de otros grupos, que parecen estar sufriendo en silencio, los profesores pertenecen a un sindicato poderoso que puede convocar a un gran número de protestas. Y en el último mes, las huelgas se han extendido a las escuelas que no han recibido ninguna amenaza, que cerraron por solidaridad o temor.
"Todos tenemos miedo", dijo un profesor de la escuela de dibujo de secundaria que quiso dar su nombre sólo como[b] Noemi. "Somos el banco [de la extorsión], porque tenemos un salario que es un poco más estable que el resto."
A escala nacional, el aumento de la extorsión fue arrancada del doloroso enfoque el mes pasado, después de que presuntos hombres que trabajan para el cartel de los Zetas incendiaron un casino en la norteña ciudad de Monterrey, matando a cuando menos 52 personas que se encontraban en su interior- Los funcionarios estatales dijeron que los propietarios se negaron a pagar la cuota de piso que aumentaron los Zetas Mientras poderosas organizaciones criminales como los Zetas han hecho desde hace mucho tiempo la extorsión su tarjeta de presentación, y desde entonces han tomado a la vida como de su propiedad.
Desde que hace cinco largos años Lipillo campaña contra los carteles de la droga, la estrategia gubernamental ha ido enfocar los recursos sobre los grandes líderes ( excepto el Joaquín, Chapo Guzmán ) y fracturar a las grandes organizaciones en grupos más pequeños. Pero cuando alas bandas violentas se les quitan sus jefes, que saben como mover la droga hacia los Estados Unidos de Amnesia, o se les saca de las tradicionales rutas de trasiego de las drogas, buscan nuevas líneas de “trabajo” y según los expertos, la extorsión es la menos arriesgada.
continuará....
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