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El pragmatismo es una escuela filosófica creada en los Estados Unidos a finales del siglo XIX por Charles Sanders Peirce, John Dewey y William James.
Su concepción de base es que sólo es verdadero aquello que funciona, enfocándose así en el mundo real objetivo.
Se caracteriza por la insistencia en las consecuencias como manera de caracterizar la verdad o significado de las cosas.
El pragmatismo se opone a la visión de que los conceptos humanos y el intelecto representan el significado real de las cosas, y por lo tanto se contrapone a las escuelas filosóficas del formalismo y el racionalismo. También el pragmatismo sostiene que sólo en el debate entre organismos dotados de inteligencia y con el ambiente que los rodea es donde las teorías y datos adquieren su significado.
Rechaza la existencia de verdades absolutas, las ideas son provisionales y están sujetas al cambio a la luz de la investigación futura.
El pragmatismo, como corriente filosófica, se divide e interpreta de muchas formas, lo que ha dado lugar a ideas opuestas entre sí que dicen pertenecer a la idea original de lo que es el pragmatismo. Un ejemplo de esto es la noción de practicidad: determinados pragmatismos se oponen a la practicidad y otros interpretan que la practicidad deriva del pragmatismo. Esta división surge de las nociones elementales del término pragmatismo y su utilización. Básicamente se puede decir que, ya que el pragmatismo se basa en establecer un significado a las cosas a través de las consecuencias, se basa en juicios a posterioridad y evita todo prejuicio. Lo que se considere práctico o no, depende del considerar la relación entre utilidad y practicidad.
Una mala comprensión del pragmatismo da lugar a generar prejuicios cuando es todo lo contrario.
En política se suele hablar de pragmatismo cuando en verdad el pragmatismo político se basa en prejuicios y apenas observa las consecuencias que no encajen con los prejuicios de base, que es muchas veces lo opuesto al sentido original del pragmatismo filosófico.
La palabra pragmatismo (pragmatism) proviene del vocablo griego pragma que significa "situación concreta".
Para los pragmatistas la verdad y la bondad deben ser medidas de acuerdo con el éxito que tengan en la práctica.
En otras palabras, el pragmatismo se basa en la utilidad, siendo la utilidad la base de todo significado...
Re: Opíname de libros y de autores/C.P.Peirce,filosofo,lógico,cientifico
Charles Sanders Peirce (pronunciado /ˈpɜrs/ purse en inglés) (Cambridge, Massachusetts, 10 de septiembre de 1839 - Milford, Pensilvania, 19 de abril de 1914) fue un filósofo, lógico y científico estadounidense.
Es considerado el fundador del pragmatismo y el padre de la semiótica moderna.
:girl_co biografía
Sus padres fueron Sarah y Benjamin Peirce, profesor de astronomía y matemáticas en Universidad Harvard. Aunque se graduó en química en la Universidad Harvard, nunca logró tener una posición académica permanente a causa de su difícil personalidad (tal vez maniaco-depresiva), y del escándalo que rodeó a su segundo matrimonio después de divorciarse de su primera mujer, Melusina Fay.
Desarrolló su carrera profesional como científico en la United States Coast Survey (1859-1891), trabajando especialmente en astronomía, en geodesia y en medidas pendulares. Desde 1879 hasta 1884 fue profesor de lógica a tiempo parcial en la Universidad Johns Hopkins. Tras retirarse en 1887, se estableció con su segunda mujer, Juliette Froissy, en Milford (Pensilvania) donde murió de cáncer después de 26 años de escritura intensa y prolífica. No tuvo hijos.
Para los hispanoparlantes no deja de ser sorprendente que desde 1890 Peirce añadiera un "Santiago" a su nombre y utilizara con alguna frecuencia para su firma la de "Charles Santiago Sanders Peirce". Puede encontrarse una detallada explicación al respecto aquí (en inglés).
bra y valoración crítica
Peirce publicó dos libros, Photometric Researches (1878) y Studies in Logic (1883), y un gran número de artículos en revistas de diferentes áreas. Sus manuscritos, una gran parte de ellos sin publicar, ocupan cerca de 80.000 páginas. Entre 1931 y 1958 se ordenó temáticamente una selección de sus escritos y se publicó en ocho volúmenes con el nombre de Collected Papers of Charles Sanders Peirce (generalmente citado por volumen [punto] párrafo, en la forma "CP x.y"). Desde 1982, se han publicado además algunos volúmenes de Writings of Charles S. Peirce: A Chronological Edition (volumen página: "W x:y"), que aspira a alcanzar treinta volúmenes.
William James reconoció a Charles Peirce como fundador del pragmatismo. El pragmatismo, como Peirce lo describía, puede entenderse como un método de resolver confusiones conceptuales relacionando el significado de concepto alguno con un concepto de las concebibles consecuencias prácticas de los efectos de la cosa concebida (CP 8.208) — las implicaciones imaginables para la práctica informada. El significado de un concepto es general y consiste no en los resultados individuales hechuales mismos sino en el concepto general de los resultados que ocurrirían. Sin ninguna duda, esta teoría no guarda ninguna semejanza con la noción vulgar de pragmatismo, que connota una burda búsqueda del beneficio así como la conveniencia política. En cambio, el pragmatismo de Peirce es un método de experimentación conceptual, hospitalario para la formación de hipótesis explicativas, y propicio para el uso y la mejora de la verificación.
Típico de Peirce es su interés en la formación de hipótesis explicativas como fuera de la alternativa fundacional habitual entre el racionalismo deductivista y el empirismo inductivista, aunque Peirce fue un lógico matemático y un fundador de la estadística.
Peirce es también considerado como el padre de la semiótica moderna: la ciencia de los signos. Más aún, su trabajo —a menudo pionero— fue relevante para muchas áreas del conocimiento, tales como astronomía, metrología, geodesia, matemáticas, lógica, filosofía, teoría e historia de la ciencia, semiótica, lingüística, econometría y psicología.
Cada vez más, ha llegado a ser objeto de abundantes elogios. Popper lo ve como “uno de los filósofos más grandes de todos los tiempos”. Por lo tanto, no es sorprendente que su trabajo y sus ideas acerca de muchas cuestiones hayan sido objeto de renovado interés, no sólo por sus inteligentes anticipaciones a los desarrollos científicos, sino sobre todo porque muestra efectivamente cómo volver a asumir la responsabilidad filosófica de la que abdicó gran parte de la filosofía del siglo XX.
La filosofía de Peirce incluye:
-un sistema pervasivo de tres categorías (primero, calidad de sentimiento; segundo, reacción, resistencia; tercero, representación, mediación) (CP 1.545–559, 5.66–81, 88–92);
-la creencia de que la verdad es inmutable y es a la vez independiente de las opiniones particulares (falibilismo) y capaz de ser descubierta (ningún escepticismo radical) (CP 5.388–410);
-la lógica, como la semiótica formal,4 sobre signos, sobre argumentos, y sobre los métodos de investigación (CP 1.180–202) — incluyendo el pragmatismo filosófico (que él fundó), también una doctrina de sentido común crítico (CP 5.438–63, 497–525), y el método científico; y
en la metafísica:
- el realismo escolástico (CP 5.93–101, 8.208),
- la creencia en Dios (CP 6.452–85), la libertad (CP 6.35–65), y, a lo menos, una forma atenuada de inmortalidad (CP 7.565–78, 6.519–21),
-un idealismo objetivo (pero no absoluto ni Kantiano) (CP 6.7–34), y
-la creencia en la realidad de lo continuo y de tres cósmicos factores y principios evolucionarios: el azar absoluto (espontaneidad), la necesidad mecánica, y el amor creativo (CP 6.278–317).
En la obra de Peirce, el falibilismo y el pragmatismo pueden parecer que funcionan algo así como el escepticismo y el positivismo, respectivamente, en las obras de otros.
Sin embargo, para Peirce, el falibilismo se equilibra con un anti-escepticismo y es una base para creer en la realidad del azar absoluto y de la continuidad (CP 1.141–75), y el pragmatismo somete a uno a la creencia anti-nominalista en la realidad de lo general (CP 5.429–35).
Sin embargo, Charles S. Peirce no debería ser considerado principalmente como filósofo o como lógico, sino como científico, tanto por su formación como por su carrera profesional. Sus informes a la Coast Survey son un testimonio notable de su experiencia personal en el duro trabajo de medir y obtener evidencias empíricas. Una mirada a esos informes oficiales o a sus Photometric Researches producidos en los años 1872-1875 proporciona una vívida impresión de trabajo científico sólido. Como escribió Max Fisch, «Peirce no era meramente un filósofo o un lógico que ha estudiado cuestiones científicas. Era un científico profesional con todo derecho, que llevó a su trabajo las preocupaciones del filósofo y del lógico».
Aunque Peirce fue un filósofo sistemático en el sentido tradicional de la palabra, su obra aborda los problemas modernos de la ciencia, la verdad y el conocimiento a partir de su propia experiencia como lógico y científico experimental que trabajaba en el seno de una comunidad internacional de científicos y pensadores.
Aunque realizó importantes contribuciones a la lógica deductiva, Peirce estaba principalmente interesado en la lógica de la ciencia y, más especialmente, en lo que llamó abducción (como complemento a los procesos de deducción e inducción), que es el proceso por el que se genera una hipótesis, de forma que puedan explicarse hechos sorprendentes.
Peirce consideró que la abducción estaba en el corazón no sólo de la investigación científica sino de todas las actividades humanas ordinarias.
Una dificultad en el estudio de Peirce es que la interpretación del pensamiento de Peirce ha provocado durante años un amplio desacuerdo entre los estudiosos peirceanos, debido en parte a la presentación fragmentaria y caótica de su obra en los Collected Papers y en parte a su ir contracorriente.
El hecho es que Peirce no es un filósofo fácil de clasificar: algunos lo consideraron un pensador sistemático, pero con cuatro sistemas sucesivos, otros lo vieron como un pensador contradictorio, o como un metafísico especulativo de tipo idealista. Sin embargo, en años más recientes ha comenzado a ganar aceptación general una comprensión más profunda de la naturaleza arquitectónica de su pensamiento y de su evolución desde sus primeros escritos en 1865 hasta su muerte en 1914.
En la última década todos los estudiosos peirceanos han reconocido claramente la coherencia básica y la sistematización del pensamiento de Peirce...
+ sobre Charles Peirce,cientifico y filosofo del siglo XIX!
Concepción de la ciencia,de C.P.Peirce
Las afirmaciones de Peirce sobre la naturaleza de la actividad científica tienen una sorprendente continuidad con las discusiones contemporáneas en epistemología, metodología y filosofía de la ciencia, sobre todo por el énfasis que puso en el carácter social y comunitario de la ciencia.
Sin duda, algunas de las manifestaciones de su absoluta confianza en el progreso científico resultan hoy en día anacrónicas.
Peirce era un hombre del siglo XIX y, en consonancia con el espíritu de su época, tenía una fe casi religiosa en la capacidad de la ciencia para descubrir la verdad.
En este sentido, Peirce era un firme defensor de una aproximación científica a la filosofía.
Es más, en cierto modo Peirce quería transformar la filosofía en una ciencia estricta, hacer de la filosofía una “filosofía científica”, no sólo en los ámbitos de la lógica y la epistemología, sino de manera más urgente y necesaria en metafísica y cosmología.
Hoy en día esa pretensión puede parecer anticuada, e incluso ridícula, propia de los filósofos del pasado o del positivismo más crudo e intransigente.
Esta actitud científica ha motivado que Peirce, a diferencia de otros pragmatistas como William James o F. C. S. Schiller, fuera visto con simpatía e incluso admiración por parte de muchos pensadores de la tradición de la filosofía analítica.
Sin embargo, aunque en alguna ocasión denominara al pragmatismo como una filosofía proto-positivista (EP 2:339, 1905), sería más que inexacto decir que Peirce fue un filósofo positivista en sentido estricto.
En primer lugar, una de las lecciones que más vivamente aprendió del devoto espíritu unitario de Harvard, —del que su padre, Benjamin Peirce, fue incansable promotor— era la idea de reconciliar ciencia y religión. Este es, efectivamente, un impulso central en toda la obra de Peirce que a menudo ha pasado desapercibido por los autores que sostienen una lectura naturalista de la máxima pragmática y del método científico.
De hecho, para Peirce la investigación científica es la actividad religiosa por excelencia, puesto que su objeto es, sencillamente, la búsqueda apasionada y desinteresada de la verdad (CP 1.234, 1901).
Peirce adoptó un concepto muy amplio de ciencia que no quedaba restringido a las ciencias entendidas como ciencias de laboratorio.
Para él la ciencia no consiste ni única ni principalmente en una colección de hechos o métodos, ni siquiera en un conjunto sistemático de conocimientos; se trata de una actividad social.
Esto es, la ciencia es una investigación auto-controlada, responsable y auto-correctiva llevada a cabo por hombres y mujeres reales bajo un mismo principio de cooperación con vistas a un fin muy particular: la consecución de la verdad (CP 7.87, 1902; cfr. EP 2:459, 1911).
En otras palabras, la ciencia es un “proceso vivo” encarnado en un grupo de investigadores y animado por un intenso deseo de averiguar cómo son las cosas realmente (CP 1.14, c.1897), por “un gran deseo de aprender la verdad” (CP 1.235, 1902). De hecho, dirá Peirce, “el deseo de aprender” es el más importante requisito de la ciencia y la primera regla de la razón (CP 1.135, c. 1899). Este requisito viene de la mano de otro precepto que, según Peirce, debería escribirse en todas las paredes de la ciudad de la filosofía: “no bloquear el camino de la investigación” (CP 1.135, c. 1899).
De acuerdo con su experiencia como científico entrenado en las salas de laboratorio, Peirce quería hacer de la filosofía una ciencia alejada tanto del diletantismo literario como de la filosofía académica tradicional, a la que consideraba animada por un espíritu dogmático y racionalista.
Pero esto no suponía reducir, como hacía el positivismo, todos los modos de conocimiento al conocimiento científico, sino que indicaba simplemente la necesidad de abordar los problemas filosóficos con una actitud experimental. Es decir, con un talante comunicativo y abierto a la revisión continua, a la necesaria corrección que implican tanto la discusión pública con los colegas como el contraste con la experiencia en el proceso de investigación científica. Esta actitud, que Peirce denominó falibilismo, era una consecuencia necesaria de su rechazo radical del fundacionalismo característico de la filosofía moderna, que consideraba encarnada de modo prototípico en la figura de Descartes.
En concreto, Peirce criticó muy duramente el repliegue de la filosofía moderna hacia el interior de la conciencia, el recurso a la introspección como garantía del conocimiento y la idea de intuición, entendida como aquella cognición no determinada por cogniciones previas. En su rechazo del espíritu escolástico, el cartesianismo había hecho del 'cogito' la fuente última de la certeza, así como el eslabón fundante de todo el edificio del conocimiento, entendido como una cadena de razonamientos que se deducen de ese fundamento o principio necesario. Como consecuencia, el individuo y su conciencia constituían, en última instancia, la única garantía de la ciencia y el conocimiento racional.
Para Peirce esto era una "filosofía de sillón", meramente especulativa y alejada del modo en que realmente trabajan los científicos.
Para Peirce la ciencia era, en gran medida, el trabajo cooperativo y comunitario de hombres y mujeres trabajando en intercomunicación, corrigiéndose unos a otros en un proceso continuo de revisión de hipótesis, que conduciría a una opinión final encarnada en una comunidad ideal de investigadores.
De igual modo, la duda metódica era para Peirce un modo insincero de acercarse a los problemas del conocimiento, pues no tenía en cuenta que los seres humanos estamos siempre enmarcados en un proceso activo y dinámico de corrección y adquisición de nuevas creencias.
En este proceso, la duda es una irritación, una insatisfacción real producida por la resistencia que la realidad impone sobre determinadas creencias previas debido a una situación nueva que desafía el conjunto de hábitos acumulado por la experiencia.
La duda es, por tanto, un catalizador para la puesta en marcha de nuevas creencias que permitan controlar esa situación inestable y, por tanto, proporcionan al agente de disposiciones firmes para actuar.
Como dice Peirce, no se puede dudar a placer. La duda cartesiana es una duda artificial, una “duda de papel” (CP 5.445, 1905). En definitiva, no podemos pretender dudar en la filosofía de aquello de lo que no dudamos en nuestros corazones (CP 5.265, 1868)...
Pragmatismo:¿que es?..filosófico,político,moral o simplemente práctico...
Pocas veces se repara en que el tono derogatorio con que tiende a emplearse en el habla común el término "pragmatismo" y sus derivados merece alguna explicación.
Se trata de un caso, por lo demás frecuente, de trasvase hacia el vocabulario cotidiano de un elemento del léxico filosófico (acuñado en concreto por el eminente filósofo y lógico norteamericano Charles Sanders Peirce, 1839-1914). De ello no se sigue, naturalmente, que su significado corriente sea fiel al original más técnico -como tampoco la expresión "un partido de fútbol trascendental" tiene nada que ver con la teoría kantiana-, ni que el pragmatismo filosófico deba tener tan mala prensa como el pragmatismo político o el pragmatismo moral. Sin embargo, es posible que una aproximación al sentido originario de este vocablo en filosofía, que es lo que aquí se va a ofrecer, provoque por añadidura alguna reflexión sobre su uso peyorativo en el lenguaje cotidiano y sobre las actitudes implícitas en él.
I. El pragmatismo no es propiamente una teoría filosófica, sino un "modo de pensar" (así lo llamó otro de sus impulsores, el filósofo y psicólogo también norteamericano William James, 1842-1910) en el que tienen cabida teorías distintas y que puede aplicarse a diferentes disciplinas. Pero, para los fines de una visión de conjunto, podemos considerarlo en principio como una teoría del conocimiento o, mejor aún, como una teoría del ser humano visto desde su función cognoscitiva.
Es característico de los pragmatistas pensar que la filosofía, en un proceso de creciente abstracción y ensimismamiento, ha terminado por perder en muchos casos el contacto con los procesos reales cuyo examen crítico constituye su principal tarea, con la consiguiente merma en la utilidad y relevancia de sus aportaciones. Por ello creen que es preciso recobrar una perspectiva más próxima a lo que en verdad hacemos, decimos y pensamos antes de tomar otra vez distancia y continuar la reflexión.
En otras palabras, la capacidad crítica de la filosofía debería dirigirse en estos tiempos -y el matiz temporal es importante, pues los pragmatistas son reacios a considerar cualquier asunto en términos absolutos- a liberar ante todo nuestra visión de ciertos lastres y adherencias que desfiguran el panorama, impidiendo que podamos comprender realmente lo que hacemos o actuar conforme a lo que pretendidamente pensamos.
Si la crítica filosófica tiene alguna eficacia transformadora, cosa que los pragmatistas creen ardientemente, el servicio que hoy puede prestar no está tanto en anticiparse con las ideas a los tiempos como en ponerlas a su altura, recuperando, por así decir, las riendas de la situación.
Algunos de los lastres que el pragmatismo considera más dañinos en relación con todo lo que concierne al conocimiento humano provienen de los primeros intentos de la filosofía por definir su ámbito.
Aristóteles abordó la cuestión clasificando el conjunto del saber en tres modalidades (Met.A 980a 21-982a 3):
- un saber técnico o productivo [epistéme poietiké],
- un saber práctico o prudencial [epistéme praktiké] y
-un saber contemplativo o especulativo [epistéme theoretiké].
Todos ellos constituyen saber o conocimiento [epistéme] porque no se quedan en la mera familiaridad con el "qué" de las cosas que se gana a base de experiencias repetidas y rutinas interiorizadas -hasta aquí llega el experto o perito, el hombre experimentado o con pericia, que no puede enseñar lo que sabe porque propiamente no lo sabe-, sino que avanzan hasta los "porqués", a la comprensión de los principios y razones que determinan esas cosas, la cual se gana por mediación únicamente de la inteligencia superior, que opera con relaciones abstractas y lenguaje -y aquí sólo llega el sabio, que es el que propiamente sabe y puede enseñar con palabras.
El saber productivo busca lo verdadero -esto es, los principios generales válidos- en relación con nuestra predisposición natural a producir y transformar toda clase de cosas: aquí incluye Aristóteles desde el arte de explotar la tierra (agricultura) hasta el de componer un discurso (retórica), pasando por el de construir un puente (ingeniería).
- El saber práctico busca lo verdadero en relación con nuestra disposición natural a actuar, no como medio para producir algo, sino en la medida en que lo que practicamos nos hace más o menos felices, o justos, o perfectos; es decir, estudia la acción como fin en sí misma, y éste es el objeto de la ética y la política.
- El saber contemplativo, por último, presenta una diferencia notable respecto de los otros dos: la técnica y la práctica estudian cosas que dependen de nosotros, tanto para su existencia como para la forma concreta que adquieren -una cosecha, un discurso, un puente, una conducta o una ley existirán si queremos y como decidamos-; estudian cosas que son "contingentes". Pero hay cosas que no podemos crear o cambiar -como el ritmo de los planetas, la dirección en que se mueve una piedra al soltarla en el aire, las fases que van de la semilla al árbol o las relaciones entre los números-, pues todas ellas tienen en sí mismas su razón de ser, son "necesarias" y no pueden ser de otro modo. Por eso llama Aristóteles a este saber "contemplativo" ("teorético": del griego theoréin, mirar), pues ante tales cosas somos simples espectadores y nada podemos hacer al respecto. Siendo así, y puesto que pese a todo deseamos también conocer esas cosas -incluso con más ahínco que las demás, ya que nos proporcionan un especial placer intelectual-, este saber tiene que responder en nosotros a una cierta predisposición natural a demostrar o a comprender [héxis apodeiktiké]; ella nos mueve a buscar lo verdadero por sí mismo, sin esperar ningún beneficio utilitario a cambio. Tal desinterés prueba la mayor nobleza de este impulso, que nos distancia por completo de los otros animales; pero también significa que sólo podemos consagrarnos a él una vez resueltas nuestras necesidades anteriores (el instinto de vivir, aunque menos noble, es más urgente que el de comprender), y así el conocimiento en su más pura expresión sólo podrá comenzar una vez que ya no tenemos nada que hacer...
+ sobre el PRAGMATISMO..en el conocer y el saber cientifico y/o práctico
Una clasificación nunca es verdadera o falsa; lo que en ella importa es el orden, la exhaustividad, y la luz que arroja sobre aquello que clasifica.
A este respecto, la clasificación aristotélica del saber es todo un hito, especialmente si se tiene en cuenta el contexto intelectual del que procede. Supera claramente a la de Platón, quien pensaba que hay una única epistéme, el saber dialéctico o intuición de las Formas inteligibles, fuera del cual todo es mera opinión [dóxa] y conocimientos hipotéticos.
El mérito de Aristóteles no está sólo en haber abierto el camino para las ciencias naturales al extender el saber a las cosas sensibles y perecederas -como los animales y las plantas- en contra de la opinión de su tiempo, que veía en esto algo inferior e indigno del hombre sabio, sino en hacerlo llegar también a la esfera técnica y práctica, que deja de ser el dominio exclusivo de la rutina y el hábito y se convierte en un nuevo territorio conquistado para las leyes y principios de que se alimenta la razón.
En realidad, la clasificación aristotélica no tiene otro defecto que el de su propio estaticismo. Al no incidir en la interacción entre los tres ámbitos del conocimiento, éste se hace aparecer engañosamente como la prosecución de tres intereses independientes -en la producción, en la acción y en la verdad "por sí misma"-, y el propio sujeto como la superposición de tres figuras, o tres "cuasi-entidades", con motivaciones y disposiciones separadas -el productor, el agente y el pensador especulativo: los tres son inteligentes y racionales, los tres atienden a las causas y los principios, pero la articulación que cabría esperar de este común proceder se disuelve en los compartimentos de la clasificación. Por ejemplo, es seguro que Aristóteles se equivoca cuando afirma que el conocimiento de las cosas "necesarias" no puede reportar ningún beneficio utilitario. Que no podamos modificar las leyes generales que gobiernan la naturaleza no quiere decir en absoluto que su contemplación no revierta en nuestra disposición productiva y práctica: por citar un caso obvio, la ingeniería genética y la bioética sencillamente no existirían como variedades del saber técnico y práctico si no hubiéramos llegado a contemplar los principios que dirigen la vida y que en sí mismos no podemos alterar.
Una razón muy simple por la que Aristóteles creyó que el conocimiento teorético sólo podía descansar en un deseo natural de buscar la verdad por sí misma es que estaba convencido de que el hombre había tocado el techo de su desarrollo tecnológico, de que ya existían "casi todas las cosas necesarias y las relativas al descanso y al ornato de la vida" (Met.A 982b 22). La ingenuidad de esta opinión hoy nos hace sonreír, pero sin darnos cuenta seguimos en parte atrapados en una imagen del conocimiento construida sobre ella. Lo anacrónico aquí no es el modesto punto en que queda situada la supuesta cima de nuestro desarrollo material, sino la idea misma de una culminación en él.
Para el hombre moderno, el significado de la tecnología no se restringe a la satisfacción de necesidades dadas; tiene que ver sobre todo con la capacidad de crear posibilidades nuevas, inéditas. Por eso mismo la percibimos ambiguamente como fuente al mismo tiempo de esperanzas y de peligros, como panacea y como amenaza -algo tan consustancial a la mentalidad moderna y contemporánea como inconcebible para una mente antigua o medieval, aristotélica. Por eso también su desarrollo no puede culminar propiamente: la tecnología no tiene un límite natural, y esto es justamente lo que introduce la posibilidad de su colapso. La idea de un conocimiento "puro" que comienza donde termina el imperativo técnico y práctico; que está libre, por tanto, de consecuencias y de responsabilidades materiales; de un conocimiento que no involucra a productores y agentes, sino a contempladores pasivos sin otro fin o interés que la verdad "por sí misma"; la idea, en definitiva, de un saber que rebasa las coordenadas activas y electivas dentro de las que transcurre la vida en general, es fruto de una visión estrecha y disminuida (nacida en un contexto histórico, cultural y material, pero que no murió con él), tanto de las auténticas dimensiones del potencial transformador humano, como del papel que el conocimiento teorético desempeña a esos efectos...
Re: La Tabla de Carnéades..La FILOSOFIA PERENNE/Aldous Huxley
Aldous Huxley: La filosofía perenne (“The Perennial Philosophy”)
El gran escritor inglés Aldous Huxley (1894-1963) emigró a los Estados Unidos en la década de 1930 luego de realizar estudios en la Universidad de Oxford, perteneció a una reconocida familia de librepensadores, científicos e intelectuales.
Huxley fue muy versátil en su pluma, podía escribir prácticamente sobre todo, desde ensayos, cuentos, novelas, guiones y especialmente crítica social. Durante sus últimos años de vida se interesó por diversos temas místicos y espirituales, como la parapsicología y la filosofía mística, acerca de los cuales escribió varios libros.
Sus principales obras (que se encuentran fácilmente en circulación en nuestro medio) son: “Un mundo feliz” (“A Brave New World”) (1932), novela que trata sobre un posible fututo automatizado, robotizado y deshumanizado; “Las puertas de la percepción” (“The doors of perception”) (1954), ensayo que fue tomado por el grupo “The Doors” como nombre que identificó su banda. El libro trata sobre sus experimentos con mezcalina en sí mismo, escribiendo qué sintió y qué sensaciones le produjo esa sustancia; “Cielo e infierno” (“Heaven and hell”) (1956), ensayo en donde plantea alternativas científicas a las llamadas experiencias místicas; “Nueva visita a un mundo feliz” (1958), ensayo en donde reflexiona y hace comparaciones con la novela “1984” de George Orwell, 20 años después de haber publicado “Un mundo feliz”, estableciendo qué cosas estaban en camino de convertirse en realidad -no estaba muy equivocado con respecto al proceso de deshumanización por el que estamos pasando-.
una breve exploración del voluminoso texto “La filosofía perenne” (1946) en donde toca temas metafísicos: “parte de la filosofía que trata del ser en cuanto tal, y de sus propiedades, principios y causas primeras” (DRAE). No vamos a centrarnos en discusiones sobre qué es la metafísica, sino, leeremos breves citas selectas incluidas en el texto del incomparable estudio de Huxley.
“La bondad no necesita penetrar en el alma, pues ya está en ella, aunque no se perciba”. Teología Germanica.
“Cuando Diez Mil cosas se ven en su unidad, volvemos al Origen y nos quedamos donde estuvimos siempre”. Sen T’sen.
“¿Quién es Dios? No se me ocurre mejor respuesta que ‘Aquel que es’. Nada es más apropiado a la eternidad que Dios es. Si llamas a Dios bueno, o grande, o bendito, o sabio, o cualquiera otra cosa de tal clase, está todo incluido en las palabras ‘Él es’”. San Bernardo.
“¡Cielos, continuad el trato!/ Sienta el hombre superfluo, alimentado/ por sus pasiones que esclaviza/ vuestra ordenanza, que no ve/ porque no siente, pronto vuestro poder”. Shakespeare.
“El amor es infalible; no tiene errores, pues todos los errores son faltas de amor”. William Law.
“ El amor no consiste en sentir grandes cosas, sino en tener gran desnudez y padecer por el Amado”. San Juan de la Cruz.“Cuando el corazón llora por lo que ha perdido, el espíritu ríe por lo que ha encontrado”. Anónimo aforismo sufí.
“¿Qué estás charlando acerca de Dios? Cualquier cosa que tú digas de Él es falsa”. Eckhart.
“Con la lámpara de la palabra y el discernimiento débese ir más allá de la palabra y del discernimiento y entrar en el camino del advenimiento”. Lankavatara Sutra.
“Vende tu astucia y compra asombro; astucia es mera opinión, maravilla es intuición”. Jalal-uddin Rumi.
“En otras criaturas vivientes, la ignorancia de sí es naturaleza; en el hombre, es vicio”. Boecio.
“El hombre es hecho por su creencia. Según cree, así es”. Bhagavad Gita.
“Es la mente lo que da a las cosas su calidad su fundamento y su ser. A quienquiera que hable u obre con mente impura, el pesar le sigue, como la rueda sigue los pasos del buey que arrastra la carreta”. Dhammapada.
“Como una abeja que recoge miel de distintas flores, el hombre prudente acepta la esencia de las distintas Escrituras y ve sólo lo bueno de todas las religiones”. Del Srimad Bhagavatam.
“El que sabe no habla; el que habla no sabe”. Lao Tse.
“El perro que ladra; la Caravana pasa” Proverbio árabe.
“Por mi parte, la única perfección que conozco es un cordial amor a Dios y el amar al prójimo como a sí mismo. La caridad es la única virtud que rectamente nos une a Dios y al hombre. Tal unión es nuestro objetivo final y todo el resto es mero engaño”. Jean Pierre Camus.
“Si volimus non redire, currendum est. (Si no queremos retroceder, debemos correr”. Pelagio.
“Si dijeses: ‘Ya basta; alcancé la perfección’ todo está perdido. Pues es función de la perfección hacer que uno conozca su propia imperfección”. San Agustín.
“Estas obras (de misericordia), aunque sólo sean activas, ayudan mucho, y disponen al hombre, en el comienzo a alcanzar después la contemplación”. Walter Hilton.
Tomado de:
Huxley A. (1967). La filosofía perenne. Buenos Aires: Sudamericana.
Re: Cuéntame un cuento...Mi vida en San Francisco 226,colonia del Valle!!!
¡Erase que fue!
Cuando era un virtuoso doncel de unos 4 a 12 años,vivia en una amplia y enjardinada casa casa ubicada en San Francisco 226,colonia del Valle muy dedicado a pasear y/o conocer en mi bicicleta'Hercules'inglesa de procedencia por todas las cercanias-de avenida Insurgentes a la avenida Coyoacan,de la calle de Xola al norte a Providencia hacia el sur,o más...
Hice'patria'conociendo mi ciudad,no tan poblada y con muchos menos automóbiles,camiones,etc.,etc.,en una época en que habia una amplia red de tranvias electricos y/o trolebuses para ir y venir muy comodamente de manera poco costosa como desde 'la Villa' a 'Xochimilco',de Polanco a Pantitlan,al aereopuerto y a las estaciones de ferrocarril varias para poder ir y venir en tren a lugares como Morelia,Cuernavaca,Laredo,Monterrey,etc...
¡Vivi en la UTOPÍA,que fue el México DF de los 1930's-1940's!
Morelos..decenas de balnearios,parques acuaticos,zonas arqueológica
Entre los principales atractivos turísticos del estado sobresale el Parque Nacional del Tepozteco, donde se ubica la Pirámide del Tepozteco, el Ex-convento de Tepoztlán) y el sitio arqueológico de Coatetelco, además de Las Pilas, Xochicalco en Temixco y Miacatlan, y La Hacienda de Cortés.
En Cuernavaca se encuentran la Catedral, el Jardín Borda (antigua casa de Maximiliano y Carlota), el Palacio de Cortés, todas estas ubicadas en el centro de la ciudad; el Jardín Etnobotánico y las ruinas de Teopanzolco.
También cabe destacar el municipio Cuautla, conocido por sus balnearios de aguas sulfurosas y demás sitios históricos prehispánicos que también son un gran atractivo turístico nacional.
Temixco cuenta con el parque acuático Ex Hacienda de Temixco, el cual recibe un gran afluente de visitantes al año, tanto del interior de la républica como del exterior.
El turismo gusta de admirar y adquirir productos locales salidos de la mano y la creatividad de los pobladores; una de las mejores oportunidades para esto se tiene en la colonia 3 de mayo.
En la Zona Oriente del estado se encuentran lugares muy atractivos para el turismo entre los que destacan las Aguas Termales de Atotonilco, Huazulco y sus dulces típicos y en el municipio de Zacualpan de Amilpas, entre la tranquilidad y el clima envidiable, podemos disfrutar de recorridos al Convento de la Inmaculada Concepción de Zacualpan de Amilpas del siglo XVIII , proclamado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994, podemos visitar sus exhaciendas y maravillarnos con las artesanías que producen y la calidad de la gente que ahì habita.
Hay muchas exhaciendas en este hermoso estado, entre ellas destaca la exhacienda de Coahuixtla en el municipio de Villa de Ayala, lugar que ha sido anfitrion de diferentes sets cinematograficos y es visitado los fines de semana, por el "TURIBUS", que parte de la alameda central de Cuautla y tiene como uno de sus destinos a esta hacienda que sirvio para el almacenamiento de caña de azucar. Y ya estando en este municipio podemos dar un paseo por la Casa Museo Emiliano Zapata, lugar donde nacio y vivio su niñes el caudillo del sur, el Gral. Emiliano Zapata Salazar, esto en el poblado de Anenecuilco, a 5 minutos al sur de Cuautla.
Si se quiere una visita breve a algunos de los lugares más bellos de Morelos visita la siguiente página: http://www.youtube.com/watch?feature...HzRPIIqQ&gl=MX en donde se destacan lugares como Tepoztlán, Xochicalco, la ciudad de Cuautla, las Estacas, el Palacio de Cortés, Tlayacapan, Barranca de Amanalco, la Hacienda de Vista Hermosa, Tequesquitengo, Amatlán y el Jardín Borda...
24 o + muertos en explosión de refineria en Venezuela en manos del mandril Chavez
Aumenta a 24 el número de muertos por explosión de refinería en refineria amuay, en venezuela
El complejo refinador de Parguaná es uno de los más grandes del mundo.
Al menos 24 personas murieron y más de medio centenar resultó herida por una explosión en el complejo de refinerías de Paraguaná, el principal de Venezuela y uno de los más grandes del mundo.
El saldo de víctimas fue confirmado por el vicepresidente, Elías Jaua, quien detalló que la mayoría eran miembros de la Guardia Nacional.
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El número dos del gobierno de Hugo Chávez confirmó que la explosión derribó parte de la cerca perimetral de la refinería y afectó a varias viviendas cercanas a la instalación.
Jaua llamó a la calma y anunció un "plan de asistencia" para los afectados.
A la explosión continuó un enorme incendio del que resultó una alta columna de humo negro visible en la distancia.
El fuego continuaba ocho horas después. Las autoridades aseguran que no hay posibilidad de que se extienda.
La gobernadora del estado Falcón, Stella Lugo, indicó que "se evacuaron las áreas que se tenían que evacuar, pero ya la situación, según me están diciendo los técnicos que están dentro de la refinería, está controlada".
Amuay se encuentra en el norte de Venezuela, en la costa caribeña.
La explosión se produjo en la zona de tanques de gas de la refinería Amuray, la mayor de las tres que forman el complejo, capaz de procesar alrededor de 645.000 barriles de petróleo diarios.
El complejo refinador de Parguaná es a su vez uno de los más grandes del mundo.
Fuga de gas
El ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, culpó de la explosión a "una fuga de gas" y la posterior acumulación como la causa del incidente, que se produjo a la 1:15 de la madrugada de este sábado (5:45 GMT).
"Se creó una nube de gas que no se dispersó por las condiciones ambientales y frente a una fuente de ignición hizo explosión", explicó el ministro.
"Esta explosión y su onda expansiva causó severos daños al destacamento 54 de la Guardia Nacional, el que presta seguridad aquí en la refinería. Es un complejo militar con infraestructura residencial", agregó.
Según la versión del ministro, hasta nueve tanques llegaron a verse afectados. "Los bomberos siguen trabajando y tienen el incendio controlado, aunque hay residuos de hidrocarburos que deben terminarse de consumir, de ahí las nubes de humo negro".
El ministro confirmó que se paró la actividad de la planta. "Estamos en capacidad de reiniciar operaciones en un máximo de dos días. Tenemos suficiente almacenamiento de hidrocarburos para prever cualquier situación en el mercado interno. No tendremos mayores afectaciones".
"Ya se instalará una comisión de investigación", anunció Ramírez.
Saqueos
"Se creó una nube de gas que no se dispersó por las condiciones ambientales y frente a una fuente de ignición hizo explosión"
Rafael Ramírez, ministro de Petróleo
Diversas fuentes confirmaron que se registraron saqueos en algunas de las tiendas afectadas por la explosión, así como en viviendas que habían sido abandonadas por sus habitantes”.
“No pueden imponerse este tipo de conductas desviadas que atentan contra el espíritu de solidadridad y unidad que caracteriza al pueblo venezolano”, dijo desde el lugar el vicepresidente Jaua.
Jaua confirmó el despliegue de las Fuerzas Armadas para garantizar la seguridad en el perímetro de la refinería al haber sido afectada la cerca y “evitar que personas por curiosidad o lo que sea intenten acercarse”.
“Este es un momento para que el pueblo contribuya a la normalización ante una situación que es grave y lamentable. En este momento lo importante es atender a los familiares de las víctimas, los heridos y quienes han sido afectados materialmente”
¿Mal estado de refinerías?
En Venezuela, el país con las reservas de petróleo probadas más grandes del mundo, el estado de mantenimiento de las refinerías es una recurrente fuente de polémica entre oficialistas y expertos del sector afines a la oposición, apunta el corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Abraham Zamorano.
Estos expertos, generalmente antiguos directivos de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), denuncian que la compañía no invierte lo suficiente en el mantenimiento de las instalaciones de refinado.
Esos técnicos discrepan del presidente Hugo Chávez, que destina buena parte de los recursos de la petrolera a financiar políticas sociales pues consideran que es urgente que se reinviertan en las instalaciones de la empresa.
Los problemas de Pdvsa, entre derrames y accidentes
Recientemente se generó cierta polémica en el país cuando se confirmó desde EE.UU. que Caracas se veía obligada a importar gasolina desde Washington para cumplir con su demanda interna, lo que los expertos también explicaron por la falta de inversiones en el mantenimiento de las instalaciones.
¿ Por qué una potencia petrolera como Venezuela importa gasolina?
Re: Muere Neil Armstrong, el primer hombre-navegante en pisar la Luna
Algo así como CRISTOBAL COLON,pero descubrio que la LUNA no es de queso,como parece,sino de pura piedra,arena inanimada,+ bien bastante inutil y lejana e inaccesible...
Re: Pragmatismo:¿ es relativo al 'Know-how'/saber como?
El Know-How (del inglés saber-cómo) o Conocimiento Fundamental es una forma de transferencia de tecnología. Es una expresión anglosajona utilizada en los últimos tiempos en el comercio internacional para denominar los conocimientos preexistentes no siempre académicos, que incluyen: técnicas, información secreta, teorías e incluso datos privados (como clientes o proveedores).
Un uso muy difundido del término suele utilizarse en la venta de franquicias, ya que lo que se vende es el "saber como". Las franquicias generalmente son vendidas por países o empresas "avanzadas" que "ya lo han hecho", casi siempre en el campo de los negocios, el saber como hacerlo a personas que saben poco del tema se convierte en un patrimonio de muchos años de madurez y una ventaja comparativa muy valiosa frente a la competencia.
Etimología
Know-How, es neologismo del idioma inglés, que data del 1838.Se define como: "saber cómo hacer algo fácil y eficientemente: experiencia".
La palabra compuesta "know-how" puede ser reemplazada con muchos términos: pericias, destrezas, habilidades, dotes, alto nivel de conocimiento. Palabras que al igual que know-how significan solo "saber cómo hacer algo pronto y bien hecho".
El know-how tiene una directa relación con la experiencia, es decir la práctica prolongada que proporciona conocimiento o habilidad para hacer algo. tambien ayuda a la buena administracion...
Definición del saber como/ know-how industrial,+ o - común y corriente
Cuando se aplica a una organización se dice que es la experiencia con que esta cuenta para desarrollar sus actividades, ya sea productivas, administrativas, financieras, comerciales y de control.
El "know-how"/saber como en una empresa, a partir de la era industrial, se ha convertido en valioso activo intangible, el cual incluye la forma de mezclar componentes, los equipos utilizados, el personal que sabe hacer la receta, etc. Lo que venden los que ofrecen franquicias es precisamente el "know-How"/saber como, esto es cómo hacer las cosas en una empresa para que esta sea altamente productiva.
Cualidades del Know-How/saber como
El término "Know-How" está ampliamente estudiado en el libro "The 8 Skills That Separate People Who Perform from Those Who Don't" (en inglés: Las ocho habilidades que separan la gente que rinden y las que no) del Dr. Ram Charan, quien es uno de los consultores más reconocidos a nivel mundial. Antes de dedicarse a la consultoría fue profesor de Marketing en Harvard Business School, Kellogg School of Management y Boston University.
Según este libro las ocho habilidades principales del "Know-How"/saber como son las siguientes:
1. Posicionar y Re-posicionar. Encontrar la idea central del negocio que permita satisfacer las demandas de los compradores y hacer dinero.
2. Identificar con Precisión el Cambio Externo. Detectar las amenazas de cambio en el comportamiento de industrias y compradores, para mantener el negocio a la ofensiva.
3. Liderar el Sistema Social. Agrupar a las personas adecuadas con las conductas correctas y la información correcta para tomar decisiones mejores, más rápidamente y conseguir resultados.
4. Examinar a la Gente. Calibrar a las personas basándose en sus acciones, decisiones y conductas, alineándolas a las demandas de trabajo.
5. Crear un Equipo. Conseguir líderes muy competentes, emocionalmente estables, realistas, maduros, calmados y leales, que trabajen juntos expeditamente.
6. Fijar Objetivos. Determinar resultados deseados que estén balanceados entre los que el negocio puede llegar a ser, con lo que es realista conseguir.
7. Establecer Prioridades con Precisión Láser. Definir el camino y alinear recursos, acciones y energías para lograr los objetivos.
8. Confrontar las Fuerzas Sociales. Anticiparse y responder a las presiones sociales que no se controlan, pero que pueden afectar su negocio.
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