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A ver que les parece esto que halle por ahi:
Justicia al Negro...
Hoy, al comenzar este nuevo año, le doy gracias a Dios por vivir en los Estados Unidos… En sólo días, un hombre de la raza negra va a abandonar su residencia privada para mudarse una casa mucho más grande y mucho más costosa.
Esta casa no fue pagada por él, sino por todos los contribuyentes a través del pago de sus impuestos. Extensas áreas verdes circundan su nueva morada, y agentes de seguridad altamente entrenados mantendrán a este hombre totalmente aislado del resto del mundo; sin embargo, el sólo hecho de que este hombre pase a residir en esta nueva casa, deberá de hacernos sentir sumamente orgullosos y debemos dar gracias a Dios por ser testigo de lo que estará sucediendo en solo días.
Este hecho prueba, de forma inequívoca, que todo es posible en esta gran nación. Muchos creyeron que este día jamás llegaría. Otros imploramos al Señor que así fuera, aunque pocos creíamos que viviríamos lo suficiente como para poder verlo con nuestros propios ojos. El racismo es un sentimiento nefasto y no hay duda de que si este cambio hubiera sucedido hace apenas quince años, habría habido alteraciones del orden y hasta manifestaciones callejeras. Hoy, todos podemos respirar en paz y sentirnos agradecidos y orgullosos porque no habrá desórdenes. No sucederá nada una vez que este enigmático hombre se mude a su nueva casa.
El hecho de que este hombre de la raza negra se mude a un nuevo recinto, marca una era de cambio. Marca un cambio en la historia de esta gran nación. Un cambio que significa que ya hemos dejado todos nuestros prejuicios atrás, y que miramos solamente hacia el futuro. Hemos cambiado un mal a un bien. Este cambio significa que hemos crecido como nación y representa nuestra intención de juzgar al hombre no por el color de su piel, sino por sus acciones y por su carácter. Cabe poca duda de que este afro-americano se ha ganado el lugar que va a ocupar en la historia por sus propios méritos, así como el derecho a ocupar su nueva morada. Su hora ha llegado. Sin embargo, sabemos que su estadía en este nuevo recinto no va a ser fácil, y que va a estar plagada de preocupaciones y de peligros. Estoy seguro de que muchas noches, al irse a la cama, se preguntará, como fue que un hombre como él, pudo llegar hasta donde ha llegado… Y como muchos que pasaron por esa misma casa antes que él, envejecerá, y su pelo se tornará cano durante todos esos largos años. Sin embargo, yo no voy a perder un sólo minuto de mi tiempo preocupándome por él, porque él es el único responsable de sus hechos. Su vida pasada, pero especialmente los últimos quince años, parecían estar enfilados inexorablemente hacia el desenlace que ya casi está por suceder. Es muy probable que si estos hechos hubieran sucedido hace quince años, hubiera sido mucho más difícil para l, poder llegar a mudarse a su nueva morada. El racismo, los desordenes públicos y las manifestaciones callejeras lo habrían impedido, o habrían empañado el bello momento que hoy estamos por vivir. Hoy le vuelvo a dar gracias a Dios por vivir en una nación como los Estados Unidos De América, pues ya hemos alcanzado la mayoría de edad en muchos respectos. Este es un país donde, sin lugar a dudas, se puede deshacer un mal para convertirlo en un bien; donde la justicia se imparte por igual a todos, no importando el color de su piel. Un país donde todo es posible…
Pero… esperen un poco. Yo no me estaba refiriendo a Barack Hussein Obama.
¡Estoy hablando de O. J. Simpson!
Hazme el chingado favor!
Cortesía de Brion
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