Se encuentran un gatito naco y pobre con una gatita fresa y muy presumida.
El gato naco le dice:
- Tons que onda Gatita ¿jugamos con el hilo?
- Ay, pero que corriente eres. No se dice hilo, se dice estambre y no, no quiero.
El gatito naco se puso triste, pero le vuelve a preguntar:
- Gatita, gatita, ¿jugamos en el pasto?
- Mmmh, pero que indio eres. No se dice pasto, se dice césped y no, no quiero.
El gatito todo desilusionado se sentó enfrente de la gatita.
De pronto pasa un ratón en medio de los dos y el gatito dice:
- Gatita, gatita, ¿cogemos al ratón?
- Uff, pero que naco eres. No se dice al ratón, se dice al rato...
¡¡¡ Y si, si quiero !!!
El gato naco le dice:
- Tons que onda Gatita ¿jugamos con el hilo?
- Ay, pero que corriente eres. No se dice hilo, se dice estambre y no, no quiero.
El gatito naco se puso triste, pero le vuelve a preguntar:
- Gatita, gatita, ¿jugamos en el pasto?
- Mmmh, pero que indio eres. No se dice pasto, se dice césped y no, no quiero.
El gatito todo desilusionado se sentó enfrente de la gatita.
De pronto pasa un ratón en medio de los dos y el gatito dice:
- Gatita, gatita, ¿cogemos al ratón?
- Uff, pero que naco eres. No se dice al ratón, se dice al rato...
¡¡¡ Y si, si quiero !!!