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Después de meditarlo un poco no es difícil arribar a la conclusión de la culpabilidad y enorme responsabilidad del poder legislativo en la grave situación que atraviesa México especialmente la violencia, impunidad, narcotráfico y una serie de injusticias resultado de la ineptitud y la falta de vocación entre otros, de nuestros congresistas que solo utilizan sus puesto$ a manera de trampolín político y un medio para acotar el poder político de sus rivales y opositores partidistas, apoyar intereses de su propio partido o grupos afines pisoteando de paso los de sus representados
Las reformas cuando llegan si es que lo hacen, llegan tarde y con muchas deficiencias pongamos por ejemplo el caso reciente de los jueces que pusieron en libertad al asesino confeso de una joven mujer cuya madre también fue asesinada por reclamar justicia, por otra parte se había venido abusando de la confesional como la madre de todas las pruebas como puede constatarse en todos los reclusorios locales donde podemos encontrar cientos de casos de inocentes pagando culpas ajenas que fueron consignados con la confesional como UNICA prueba y en la mayoría de los casos obtenida a base de torturas, que en vez de ser perseguida y castigada por si misma o~ de plano revisar todas las consignaciones de ese tipo que se hicieron por ejemplo, durante la administración de Solís Silva en la procuraduría, se decidió reformar la ley para quitarle valor probatorio a la confesional lo cual no excusa la falta de criterio de los juzgadores que pusieron en libertad a un peligroso asesino ni mucho menos de los ministerios públicos que omitieron acompañar la confesión con pruebas científicas y periciales de toda índole~ que por cierto en ese caso existían en abundancia incluyendo la ubicación de los restos calcinados de la víctima,~ éste es solo un ejemplo de cientos donde las leyes y los encargados de administrarla son deficientes, corruptos u omisos.
Pudiera extenderme por horas sugiriendo reformas indispensables pero como no es posible me permito solo referirme a la prescripción de los delitos y crímenes sin resolver que se amontonan por millares y de manera creciente acabando con la esperanza de justicia de miles de familias mexicanas y a la posibilidad de que sea el poder legislativo en vez de las fuerzas armadas y las violaciones a las garantías individuales los que se cuelguen la medalla de DERROTAR (comercialmente) al narcotráfico con el consecuente abatimiento de todo tipo de actividades criminales que en su inmensa mayoría tienen relación directa o indirecta con el tráfico y consumo de drogas, para lograr esto serían necesarias exactamente 36 reformas entre leyes, reglamentos y tratados internacionales, tarea ardua pero factible y mucho menos costosa que los miles de millones y las decenas de miles de muertes y si, aquí tengo la lista.
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Jorge Torres Parés
Cd Juárez Chih.~
Después de meditarlo un poco no es difícil arribar a la conclusión de la culpabilidad y enorme responsabilidad del poder legislativo en la grave situación que atraviesa México especialmente la violencia, impunidad, narcotráfico y una serie de injusticias resultado de la ineptitud y la falta de vocación entre otros, de nuestros congresistas que solo utilizan sus puesto$ a manera de trampolín político y un medio para acotar el poder político de sus rivales y opositores partidistas, apoyar intereses de su propio partido o grupos afines pisoteando de paso los de sus representados
Las reformas cuando llegan si es que lo hacen, llegan tarde y con muchas deficiencias pongamos por ejemplo el caso reciente de los jueces que pusieron en libertad al asesino confeso de una joven mujer cuya madre también fue asesinada por reclamar justicia, por otra parte se había venido abusando de la confesional como la madre de todas las pruebas como puede constatarse en todos los reclusorios locales donde podemos encontrar cientos de casos de inocentes pagando culpas ajenas que fueron consignados con la confesional como UNICA prueba y en la mayoría de los casos obtenida a base de torturas, que en vez de ser perseguida y castigada por si misma o~ de plano revisar todas las consignaciones de ese tipo que se hicieron por ejemplo, durante la administración de Solís Silva en la procuraduría, se decidió reformar la ley para quitarle valor probatorio a la confesional lo cual no excusa la falta de criterio de los juzgadores que pusieron en libertad a un peligroso asesino ni mucho menos de los ministerios públicos que omitieron acompañar la confesión con pruebas científicas y periciales de toda índole~ que por cierto en ese caso existían en abundancia incluyendo la ubicación de los restos calcinados de la víctima,~ éste es solo un ejemplo de cientos donde las leyes y los encargados de administrarla son deficientes, corruptos u omisos.
Pudiera extenderme por horas sugiriendo reformas indispensables pero como no es posible me permito solo referirme a la prescripción de los delitos y crímenes sin resolver que se amontonan por millares y de manera creciente acabando con la esperanza de justicia de miles de familias mexicanas y a la posibilidad de que sea el poder legislativo en vez de las fuerzas armadas y las violaciones a las garantías individuales los que se cuelguen la medalla de DERROTAR (comercialmente) al narcotráfico con el consecuente abatimiento de todo tipo de actividades criminales que en su inmensa mayoría tienen relación directa o indirecta con el tráfico y consumo de drogas, para lograr esto serían necesarias exactamente 36 reformas entre leyes, reglamentos y tratados internacionales, tarea ardua pero factible y mucho menos costosa que los miles de millones y las decenas de miles de muertes y si, aquí tengo la lista.
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Jorge Torres Parés
Cd Juárez Chih.~
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