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Los avatares de la cuántica

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  • #16
    Re: Los avatares de la cuántica

    Originalmente publicado por El Alquimista Ver post
    Saludos Tatis... Fijate que te he escrito mensajitos y hasta correitos y no me pelas. Hasta pensé que ya no me querías ni hablar. Pues qué mala cara viste?

    Si, ese Piso 13 es una propuesta bien interesante. Yo en lo personal creo que hubiera dado para mucho más. Y tampoco se por qué la película no levantó como se hubiera merecido. La ambientación de época es insuperable. El ambiente sombrío. Ese remate apresurado y el cerrojazo gratuito más que sembrar una duda, echa toda la película por la borda.

    Pero pensándolo de otro modo, eso del universo simulado es aterrador. Aunque cualquiera que sea la elucubración, como decía Cortazar: “La realidad se precipita, se muestra con toda su fuerza, y justamente entonces nuestra única manera de enfrentarla consiste en renunciar a la dialéctica, es la hora en que le pegamos un tiro a un tipo, que saltamos por la borda, que nos tomamos un tubo de gardenal como Guy, que le soltamos la cadena al perro, piedra libre para cualquier cosa. La razón sólo nos sirve para disecar la realidad en calma, o analizar sus futuras tormentas, nunca para resolver una crisis instantánea” o una interpretación de física cuántica.
    Hola Alqui!!
    Claro que nada que ver!
    Es para mi un gusto enorme poder interactuar contigo. Pero estos silencios semi involuntarios de ambas partes hace que conversemos no lo que debiéramos.
    Pero hay que reparar eso. Yo por mi parte me voy a poner en forma y a darle a la pluma.Tengo chorro de cosas que comentar.
    Un abrazote

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    • #17
      Re: Los avatares de la cuántica

      Del Manual de Teología Dogmática:

      -----
      Capítulo primero
      El origen o creación del mundo

      § 1. Realidad de la creación divina del mendo

      1. El dogma y las herejías contrarias

      Todo cuanto existe fuera de Dios ha sido sacado de la nada por Dios en cuanto a la totalidad de su sustancia (de fe).

      Frente al dualismo del paganismo antiguo y del maniqueísmo gnóstico, y frente al monismo moderno (materialismo, panteísmo), el concilio del Vaticano hizo la siguiente declaración : «Si quis non confiteatur mundum resque omnes, quae in ea continentur, et spirituales et materiales, secundum totam suam substantiam a Deo ex nihilo esse productas», a.s.; Dz 1805; cf. el símbolo de fe y el capítulo Firmiter (Dz 428).

      Crear, en sentido filosófico y teológico, significa producir una cosa de la nada : «productio rei ex nihilo (=non ex aliquo)» ; concretando más : «ex nihilo sui et subiecti» (y no «ex nihilo causae»), es decir, que antes del acto creador no existía la cosa como tal, ni tampoco sustrato material alguno del que pudiera haber sido sacada. Santo Tomas ofrece la siguiente definición : «Creatio est productio alicuius rei secundum suam totam substantiam nullo praesupposito, quod sit vel increatum vel ab aliquo creatum» (S.Th. 165, 3). Hay que distinguir de esta creación en sentido estricto (creatio prima) la llamada creatio secunda, que consiste en la información y animación de la materia informe.
      -----

      Lo creado no es una simulación. Lo creado es real.

      Comment


      • #18
        Re: Los avatares de la cuántica

        Originalmente publicado por cubo Ver post
        Del Manual de Teología Dogmática:

        -----
        Capítulo primero
        El origen o creación del mundo

        § 1. Realidad de la creación divina del mendo

        1. El dogma y las herejías contrarias

        Todo cuanto existe fuera de Dios ha sido sacado de la nada por Dios en cuanto a la totalidad de su sustancia (de fe).

        Frente al dualismo del paganismo antiguo y del maniqueísmo gnóstico, y frente al monismo moderno (materialismo, panteísmo), el concilio del Vaticano hizo la siguiente declaración : «Si quis non confiteatur mundum resque omnes, quae in ea continentur, et spirituales et materiales, secundum totam suam substantiam a Deo ex nihilo esse productas», a.s.; Dz 1805; cf. el símbolo de fe y el capítulo Firmiter (Dz 428).

        Crear, en sentido filosófico y teológico, significa producir una cosa de la nada : «productio rei ex nihilo (=non ex aliquo)» ; concretando más : «ex nihilo sui et subiecti» (y no «ex nihilo causae»), es decir, que antes del acto creador no existía la cosa como tal, ni tampoco sustrato material alguno del que pudiera haber sido sacada. Santo Tomas ofrece la siguiente definición : «Creatio est productio alicuius rei secundum suam totam substantiam nullo praesupposito, quod sit vel increatum vel ab aliquo creatum» (S.Th. 165, 3). Hay que distinguir de esta creación en sentido estricto (creatio prima) la llamada creatio secunda, que consiste en la información y animación de la materia informe.
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        Lo creado no es una simulación. Lo creado es real.
        Todo cabe en esa cazuela.
        NADA DE LO HUMANO ME ES AJENO, SOLO ME HAGO MEDIO PENDEJO EN VECES PA DESPISTAR A LOS OJETES

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        • #19
          Re: Los avatares de la cuántica

          Originalmente publicado por El Alquimista Ver post
          El tema es muy interesante y por ahí leí de un investigador que había establecido una serie de pruebas para poder confirmar o negar tal cosa sin embargo no recuerdo el nombre, ni la página

          http://losbarbarosdelnorte.com/html/...=viewforum&f=1

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          • #20
            Re: Los avatares de la cuántica

            Originalmente publicado por kabrakan Ver post
            Las películas de Matrix lo explican todo.
            Es una película magistral sobre el tema, que puedes ver varias veces y que invita a la reflexión

            http://losbarbarosdelnorte.com/html/...=viewforum&f=1

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            • #21
              Re: Los avatares de la cuántica

              Originalmente publicado por cubo Ver post
              Del Manual de Teología Dogmática:

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              Capítulo primero
              El origen o creación del mundo

              § 1. Realidad de la creación divina del mendo

              1. El dogma y las herejías contrarias

              Todo cuanto existe fuera de Dios ha sido sacado de la nada por Dios en cuanto a la totalidad de su sustancia (de fe).

              Frente al dualismo del paganismo antiguo y del maniqueísmo gnóstico, y frente al monismo moderno (materialismo, panteísmo), el concilio del Vaticano hizo la siguiente declaración : «Si quis non confiteatur mundum resque omnes, quae in ea continentur, et spirituales et materiales, secundum totam suam substantiam a Deo ex nihilo esse productas», a.s.; Dz 1805; cf. el símbolo de fe y el capítulo Firmiter (Dz 428).

              Crear, en sentido filosófico y teológico, significa producir una cosa de la nada : «productio rei ex nihilo (=non ex aliquo)» ; concretando más : «ex nihilo sui et subiecti» (y no «ex nihilo causae»), es decir, que antes del acto creador no existía la cosa como tal, ni tampoco sustrato material alguno del que pudiera haber sido sacada. Santo Tomas ofrece la siguiente definición : «Creatio est productio alicuius rei secundum suam totam substantiam nullo praesupposito, quod sit vel increatum vel ab aliquo creatum» (S.Th. 165, 3). Hay que distinguir de esta creación en sentido estricto (creatio prima) la llamada creatio secunda, que consiste en la información y animación de la materia informe.
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              Lo creado no es una simulación. Lo creado es real.
              Sin duda la Biblioteca del Vaticano atesora libros invaluables y los doctores que han pasado por ella conocen mucho del tema, pero poco se ha divulgado, recordemos que el autor de la teoría del Big bang era cura George Lemaitre, uno de los hombres mas inteligentes y cultos del siglo pasado, le corrigió la plana a Einstein

              http://losbarbarosdelnorte.com/html/...=viewforum&f=1

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              • #22
                Re: Los avatares de la cuántica

                Originalmente publicado por El Alquimista Ver post
                Saludos Tatis... Fijate que te he escrito mensajitos y hasta correitos y no me pelas. Hasta pensé que ya no me querías ni hablar. Pues qué mala cara viste?

                Si, ese Piso 13 es una propuesta bien interesante. Yo en lo personal creo que hubiera dado para mucho más. Y tampoco se por qué la película no levantó como se hubiera merecido. La ambientación de época es insuperable. El ambiente sombrío. Ese remate apresurado y el cerrojazo gratuito más que sembrar una duda, echa toda la película por la borda.

                Pero pensándolo de otro modo, eso del universo simulado es aterrador. Aunque cualquiera que sea la elucubración, como decía Cortazar: “La realidad se precipita, se muestra con toda su fuerza, y justamente entonces nuestra única manera de enfrentarla consiste en renunciar a la dialéctica, es la hora en que le pegamos un tiro a un tipo, que saltamos por la borda, que nos tomamos un tubo de gardenal como Guy, que le soltamos la cadena al perro, piedra libre para cualquier cosa. La razón sólo nos sirve para disecar la realidad en calma, o analizar sus futuras tormentas, nunca para resolver una crisis instantánea” o una interpretación de física cuántica.
                Muy interesante reflexión, he estado rumiando el tema de la realidad en Face pero creo que aquí hay mucha materia gris para tratarlo
                Saludos Alquimista

                http://losbarbarosdelnorte.com/html/...=viewforum&f=1

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                • #23
                  Re: Los avatares de la cuántica

                  Debido a que se espera que las computadoras futuras sean muy poderosas, éstas podrían realizar en paralelo una gran cantidad de tales simulaciones. Si suponemos que esta gente simulada es consciente (como debiera ser si las simulaciones fueran lo suficientemente detalladas y si una cierta postura ampliamente aceptada y conocida como “Inteligencia Artificial Fuerte” respecto de la filosofía de la mente es correcta), entonces podría ser el caso de que la gran mayoría de las mentes como las nuestras no pertenecen a la raza original sino más bien a personas simuladas por los avanzados descendientes de tal raza original. Es entonces posible decir que, si este fuera el caso, sería lógico pensar que es muchísimo más probable que estemos entre las mentes simuladas que entre las mentes biológicas originales.
                  La tierra tiene mas o menos 3,000 millones de años y nuestra civilización actual apenas unos 50,000 años. La lógica mas elementan nos dice que en esos 3,000 millones de años, debieron haber civilizaciones (la raza original) que progresaron tal vez hasta grados inimaginables por nosotros. Por alguna causa desaparecieron de la faz de la tierra sin dejar rastro pero no murieron y entonces . . . nosotros somos esas simulaciones de sus avanzadísimas computadoras, con las que se entretienen donde quiera que esten en este momento.
                  kabrakan
                  Forista Esmeralda
                  Last edited by kabrakan; 28-agosto-2014, 22:22.
                  Por la calle voy tirando la envoltura del dolor
                  Por la calle voy volando como vuela el ruiseñor ....

                  Comment


                  • #24
                    Re: Los avatares de la cuántica

                    No.

                    No todo cabe en esa cazuela.

                    -----
                    § 3. Motivo y Finalidad de la Creación del Mundo

                    1. Motivo

                    Dios fue movido por su bondad a crear libremente el mundo (de fe).

                    El fin subjetivo de la creación («finis operantis»), o motivo que indujo a Dios a crear el mundo, es, como declara el concilio provincial de Colonia de 1860, el amor de su bondad absoluta («amor bonitatis suae absolutae»). Tal amor le movió a dar existencia a seres finitos, para hacerles partícipes de sus propias perfecciones. El concilio del Vaticano declaró : «Deus bonitate sua et omnipotenti virtute, non ad augendam suam beatitudinem nec añ acquirendam, sed ad manifestandam perfectionem suam per bona, quae creaturis impertitur, liberrimo consilio... utramque de nihilo condidit creaturam» (Dz 1783; cf. Dz 706). Según el testimonio de la Sagrada Escritura, el motivo fundamental de la acción creadora divina se encuentra en Dios mismo : «Todo lo ha hecho Yahvé para sus fines» (Prov 16, 4).

                    Los padres testimonian que Dios ha creado las cosas de este mundo no porque tuviese necesidad de ellas, sino para «verter sobre ellas sus beneficios» (San Ireneo, Adv. haer. Iv, 14, 1). Orígenes enseña: «Cuando Dios al principio creó lo que quería crear, es decir, naturalezas racionales, no tenía otro motivo para crear que Al mismo, esto es, su bondad» (De princ. II, 9, 6), San Agustín dice: «Porque Al es bueno, nosotros existimos» (De doctr. christ. 132, 35); cf. San Hilario, In Ps. 2, 15; San Agustín, De civ. Dei xi, 24; San Juan Damasceno, De fide orth. II, 2.

                    La absoluta plenitud de ser de Dios y su infinita felicidad, que en aquélla se funda (in se et ex se beatissimus, Dz 1782), excluyen terminantemente que el motivo que Dios tuvo para realizar el acto creador radique en algo fuera de Dios. Santo Tomás nos enseña: «Dios no obra en provecho suyo, sino únicamente por su bondad» (S.th. I 44, 4 ad 1).

                    2. Finalidad

                    El mundo ha sido creado para gloria de Dios (de fe).

                    a) El fin objetivo de la creación (finis operis), es decir, el fin que radica en la misma obra creada, es primariamente la manifestación de las perfecciones divinas con la subsiguiente glorificación de Dios. El concilio del Vaticano definió : «Si quis... mundum ad Dei gloriam conditum esse negaverit», a. s. (Dz 1805).

                    La gloria que dan las criaturas a Dios se denomina gloria externa. Se divide en objetiva y formal. La primera la tributan todas las criaturas, sin excepción, por el hecho de su mera existencia, en cuanto que las perfecciones de las criaturas reflejan las perfecciones del Creador; cf. Ps 18, 2: «Los cielos pregonan la gloria de Dios»; Dan 3, 52 ss (Benedicite); Ps 148. La gloria formal la rinden únicamente las criaturas racionales con su entendimiento y voluntad por el hecha de que ellas conocen y reconocen la perfección de Dios; cf. Ps 146-150 (Laudate Dominum).

                    Conforme nos enseña la Sagrada Escritura, Dios no solamente es el alfa sino también la omega ; no es únicamente el principio sino también el fin y la meta de todas las cosas ; Apoc 1,. 8 : «Yo soy el alfa y la omega [es decir, el principio y el fin], dice el Señor Dios» ; cf. Rom 11, 36 : «De Él y por Él y para Él son todas las cosas» ; cf. Prov 16, 4. Según Tertuliano, Dios sacó al mundo de la nada «para ornato de su gloria» (A pol. 17).

                    No hay razón para objetar, como lo hicieron Descartes, Hermes y Günther. que significaría egoísmo reprobable el que Dios pretendiera su propia honra como fin de la creación. Las criaturas no pueden acrecentar la perfección y felicidad de Dios; y, además, la actividad divina, como perteneciente al supremo Bien, ha de ordenarse por fuerza al fin supremo, que no es sino la gloria misma de Dios.

                    b) El fin secundario de la creación es colmar de beneficios a las criaturas y, sobre todo, hacer felices a las criaturas racionales. El concilio del Vaticano nos enseña que Dios creó el mundo «para manifestar su perfección» (fin primario) «por los bienes que distribuye entre las criaturas» (fin secundario).

                    La Sagrada Escritura pone de relieve que el mundo creado debe servir al hombre, pero no considera la felicidad del hombre como fin autónomo, antes bien lo subordina a la gloria de Dios ; cf. Gen 1, 28 ss; Ps 8, 6 ss; Apoc 4, 11.

                    Estos dos fines de la creación se hallan inseparablemente unidos entre sí ; pues glorificar a Dios conociéndole y amándole constituye la suprema felicidad de las criaturas racionales.

                    Para refutar la objeción de que la gloria externa de Dios, en cuanto que es algo finito, no puede ser el fin último de la creación, hay que distinguir entre el finis qui y el finis quo de la obra creadora. El finis qui (fin objetivo) es aquello que se pretende. El finis quo (fin formal) es aquello por lo cual se alcanza lo pretendido. El finis qui de la obra de la creación es la interna bondad de Dios, que se identifica con su esencia. El finis quo es la participación de las criaturas en la bondad de Dios, que constituye al mismo tiempo la felicidad de las criaturas. La definición del concilio del Vaticano (Dz 1805) según la cual el mundo ha sido creado para gloria de Dios se refiere al finis quo, ya que la participación de las criaturas en la bondad de Dios coincide con la gloria externa de Dios. Las perfecciones de las criaturas son reflejos de las perfecciones del Creador (gloria obiectiva). La consideración de las perfecciones de lo creado conduce a las criaturas racionales a conocer y reconocer las perfecciones del Creador (gloria formalis). Mientras el finis quo es finito, el finis qui es, por el contrario, infinito. A éste se refieren los textos de la Sagrada Escritura cuando señalan a Dios como fin último de todo lo creado.
                    -----

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                    • #25
                      Re: Los avatares de la cuántica

                      La visión moderna de la ciencia es que ésta produce modelos que tratan de describir la realidad, sin aportar verdades...

                      los modelos científicos cambian constantemente... son, necesariamente, inexactos e incompletos...

                      Eso mantiene ocupados a los millones y millones de científicos que conforman la comunidad científica mundial del siglo XXI...

                      ¿quién podría alegrarse más de la caída de un modelo que los propios científicos?...

                      cada modelo que falla, cada observación que se sale de un modelo, representa trabajo (billete$), laboratorios nuevos, equipo, colaboración internacional (viajes)...

                      La buena vida...

                      Por otro lado, la mecánica cuántica es algo en lo que no me especialicé, aunque uso sus resultados un día sí y otro también... (como científico de materiales, trabajo en la frontera entre la física clásica y la cuántica)

                      Pero como aficionado a la filosofía de la ciencia, le he dedicado varias horas y algunos escritos...

                      En resumen:

                      Yo creo que la cuántica ejemplifica nuestra limitación intrínseca para entender la realidad: nuestro cerebro evolucionó para sobrevivir al depredador y el hambre, no para entender el Universo...

                      Así las cosas, conceptos como "espacio", "tiempo", "dimensión", "partícula", etc, son más un producto de nuestro cerebro, un modelo, que cosas reales...

                      La cuántica entiende mejor eso que la física tradicional... hay que ver, por ejemplo, lo qué es un electrón orbitando alrededor del núcleo: en un momento dado, no existe en ningún lado...

                      No es de extrañar, sin embargo, que conforme avanza la ciencia, vayamos dejando atrás las cosas que no tienen correspondencia con nuestra realidad humana: tristes animalitos tratando de ser dioses...

                      Tenemos que esperar que los modelos cuánticos nos traigan sorpresas...

                      Alegría pura para los científicos...





                      Ahora bien...


                      Por todo lo anterior, la descalificación de las idioteces que escribe el chaqueto de Barraza, no la hago por apego al modelo tradicional de la mecánica cuántica...

                      No, la descalificación la hago por puto amor al arte: Barraza es el mismo pendejo de toda la vida...

                      Una sola observación no hace una revolución científica...

                      En la comunidad científica actual una sola observación puede desatar una carrera mundial que involucre a las mentes más brillantes, a los institutos más prestigiados, a los presupuesto$ más abultados, a la geopolítica más feroz...

                      ¿Carrera hacia qué?... esa sí: hacia la tan anhelada revolución científica que todos esperamos esperanzados...

                      Por el momento, un experimento más...
                      Pedro Navajas
                      Forista Plata
                      Last edited by Pedro Navajas; 30-agosto-2014, 13:06.
                      OBJECTS IN MIRROR ARE CLOSER THAN THEY APPEAR...

                      Comment


                      • #26
                        Re: Los avatares de la cuántica

                        Sobre las críticas del idiota hacia la mecánica cuántica... ¿qué decir?... pobre: el lo sabe todo, antes y mejor que las mentes más brillnates del planeta... sí, como no...

                        Barraza necesita que la ciencia no se aleje de su realidad humana... necesita que el electrón esté en algún lado en un momento dado... positivismo religioso silvestre... nada nuevo bajo el Sol...
                        OBJECTS IN MIRROR ARE CLOSER THAN THEY APPEAR...

                        Comment


                        • #27
                          Re: Los avatares de la cuántica

                          Originalmente publicado por Pedro Navajas Ver post
                          Sobre las críticas del idiota hacia la mecánica cuántica... ¿qué decir?... pobre: el lo sabe todo, antes y mejor que las mentes más brillnates del planeta... sí, como no...

                          Barraza necesita que la ciencia no se aleje de su realidad humana... necesita que el electrón esté en algún lado en un momento dado... positivismo religioso silvestre... nada nuevo bajo el Sol...
                          ¿Pos que traes atorado? pinche pedro navajas, vomitas odio y expeles pendejez

                          http://losbarbarosdelnorte.com/html/...=viewforum&f=1

                          Comment


                          • #28
                            Re: Los avatares de la cuántica

                            Originalmente publicado por Marcos Barraza Ver post
                            Muy interesante reflexión, he estado rumiando el tema de la realidad en Face pero creo que aquí hay mucha materia gris para tratarlo
                            Saludos Alquimista
                            Mi estimado Marcos. Un abrazo. Pues el asunto da pa Face, Twitter, Instagram, etc, etc, etc...

                            Un placer saludarte, como siempre.
                            NADA DE LO HUMANO ME ES AJENO, SOLO ME HAGO MEDIO PENDEJO EN VECES PA DESPISTAR A LOS OJETES

                            Comment


                            • #29
                              Re: Los avatares de la cuántica

                              Originalmente publicado por cubo Ver post
                              No.

                              No todo cabe en esa cazuela.

                              -----
                              § 3. Motivo y Finalidad de la Creación del Mundo

                              1. Motivo

                              Dios fue movido por su bondad a crear libremente el mundo (de fe).

                              El fin subjetivo de la creación («finis operantis»), o motivo que indujo a Dios a crear el mundo, es, como declara el concilio provincial de Colonia de 1860, el amor de su bondad absoluta («amor bonitatis suae absolutae»). Tal amor le movió a dar existencia a seres finitos, para hacerles partícipes de sus propias perfecciones. El concilio del Vaticano declaró : «Deus bonitate sua et omnipotenti virtute, non ad augendam suam beatitudinem nec añ acquirendam, sed ad manifestandam perfectionem suam per bona, quae creaturis impertitur, liberrimo consilio... utramque de nihilo condidit creaturam» (Dz 1783; cf. Dz 706). Según el testimonio de la Sagrada Escritura, el motivo fundamental de la acción creadora divina se encuentra en Dios mismo : «Todo lo ha hecho Yahvé para sus fines» (Prov 16, 4).

                              Los padres testimonian que Dios ha creado las cosas de este mundo no porque tuviese necesidad de ellas, sino para «verter sobre ellas sus beneficios» (San Ireneo, Adv. haer. Iv, 14, 1). Orígenes enseña: «Cuando Dios al principio creó lo que quería crear, es decir, naturalezas racionales, no tenía otro motivo para crear que Al mismo, esto es, su bondad» (De princ. II, 9, 6), San Agustín dice: «Porque Al es bueno, nosotros existimos» (De doctr. christ. 132, 35); cf. San Hilario, In Ps. 2, 15; San Agustín, De civ. Dei xi, 24; San Juan Damasceno, De fide orth. II, 2.

                              La absoluta plenitud de ser de Dios y su infinita felicidad, que en aquélla se funda (in se et ex se beatissimus, Dz 1782), excluyen terminantemente que el motivo que Dios tuvo para realizar el acto creador radique en algo fuera de Dios. Santo Tomás nos enseña: «Dios no obra en provecho suyo, sino únicamente por su bondad» (S.th. I 44, 4 ad 1).

                              2. Finalidad

                              El mundo ha sido creado para gloria de Dios (de fe).

                              a) El fin objetivo de la creación (finis operis), es decir, el fin que radica en la misma obra creada, es primariamente la manifestación de las perfecciones divinas con la subsiguiente glorificación de Dios. El concilio del Vaticano definió : «Si quis... mundum ad Dei gloriam conditum esse negaverit», a. s. (Dz 1805).

                              La gloria que dan las criaturas a Dios se denomina gloria externa. Se divide en objetiva y formal. La primera la tributan todas las criaturas, sin excepción, por el hecho de su mera existencia, en cuanto que las perfecciones de las criaturas reflejan las perfecciones del Creador; cf. Ps 18, 2: «Los cielos pregonan la gloria de Dios»; Dan 3, 52 ss (Benedicite); Ps 148. La gloria formal la rinden únicamente las criaturas racionales con su entendimiento y voluntad por el hecha de que ellas conocen y reconocen la perfección de Dios; cf. Ps 146-150 (Laudate Dominum).

                              Conforme nos enseña la Sagrada Escritura, Dios no solamente es el alfa sino también la omega ; no es únicamente el principio sino también el fin y la meta de todas las cosas ; Apoc 1,. 8 : «Yo soy el alfa y la omega [es decir, el principio y el fin], dice el Señor Dios» ; cf. Rom 11, 36 : «De Él y por Él y para Él son todas las cosas» ; cf. Prov 16, 4. Según Tertuliano, Dios sacó al mundo de la nada «para ornato de su gloria» (A pol. 17).

                              No hay razón para objetar, como lo hicieron Descartes, Hermes y Günther. que significaría egoísmo reprobable el que Dios pretendiera su propia honra como fin de la creación. Las criaturas no pueden acrecentar la perfección y felicidad de Dios; y, además, la actividad divina, como perteneciente al supremo Bien, ha de ordenarse por fuerza al fin supremo, que no es sino la gloria misma de Dios.

                              b) El fin secundario de la creación es colmar de beneficios a las criaturas y, sobre todo, hacer felices a las criaturas racionales. El concilio del Vaticano nos enseña que Dios creó el mundo «para manifestar su perfección» (fin primario) «por los bienes que distribuye entre las criaturas» (fin secundario).

                              La Sagrada Escritura pone de relieve que el mundo creado debe servir al hombre, pero no considera la felicidad del hombre como fin autónomo, antes bien lo subordina a la gloria de Dios ; cf. Gen 1, 28 ss; Ps 8, 6 ss; Apoc 4, 11.

                              Estos dos fines de la creación se hallan inseparablemente unidos entre sí ; pues glorificar a Dios conociéndole y amándole constituye la suprema felicidad de las criaturas racionales.

                              Para refutar la objeción de que la gloria externa de Dios, en cuanto que es algo finito, no puede ser el fin último de la creación, hay que distinguir entre el finis qui y el finis quo de la obra creadora. El finis qui (fin objetivo) es aquello que se pretende. El finis quo (fin formal) es aquello por lo cual se alcanza lo pretendido. El finis qui de la obra de la creación es la interna bondad de Dios, que se identifica con su esencia. El finis quo es la participación de las criaturas en la bondad de Dios, que constituye al mismo tiempo la felicidad de las criaturas. La definición del concilio del Vaticano (Dz 1805) según la cual el mundo ha sido creado para gloria de Dios se refiere al finis quo, ya que la participación de las criaturas en la bondad de Dios coincide con la gloria externa de Dios. Las perfecciones de las criaturas son reflejos de las perfecciones del Creador (gloria obiectiva). La consideración de las perfecciones de lo creado conduce a las criaturas racionales a conocer y reconocer las perfecciones del Creador (gloria formalis). Mientras el finis quo es finito, el finis qui es, por el contrario, infinito. A éste se refieren los textos de la Sagrada Escritura cuando señalan a Dios como fin último de todo lo creado.
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                              Toda la creación = Dios - Dios Entonces, no cabe todo en la misma cazuela?
                              NADA DE LO HUMANO ME ES AJENO, SOLO ME HAGO MEDIO PENDEJO EN VECES PA DESPISTAR A LOS OJETES

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                              • #30
                                Re: Los avatares de la cuántica

                                Originalmente publicado por kabrakan Ver post
                                La tierra tiene mas o menos 3,000 millones de años y nuestra civilización actual apenas unos 50,000 años. La lógica mas elementan nos dice que en esos 3,000 millones de años, debieron haber civilizaciones (la raza original) que progresaron tal vez hasta grados inimaginables por nosotros. Por alguna causa desaparecieron de la faz de la tierra sin dejar rastro pero no murieron y entonces . . . nosotros somos esas simulaciones de sus avanzadísimas computadoras, con las que se entretienen donde quiera que esten en este momento.
                                Sería intrascendente. El tiempo correspondería al que estuviera corriendo en la simulación.

                                Una hipòtesis sería esa que dices; otra hipótesis sería que humanos del futuro no del pasado tuvieran la tecnología para crear universos simulados y nosotros viviríamos en esta simulación en la línea de tiempo de la simulaciòn y los programadores estén un millón de años más evolucionados que nosotros.

                                Otra hipòtesis sería que ni siquiera habitáramos el universo real siendo el universso virtual producto de la evolución científica de otra raza muy distinta, corriendo una y otra vez simulaciones de universos probables afectados por distintos elementos y condiciones.
                                NADA DE LO HUMANO ME ES AJENO, SOLO ME HAGO MEDIO PENDEJO EN VECES PA DESPISTAR A LOS OJETES

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