MortÃfero VacÃo de Poder en #México
@reformacom @nytimes @milenio @Televisa @TV_Azteca13
Por Edgardo Buscaglia

Las secuelas de un tiroteo en un vecindario de Acapulco Guerrero
Está de moda afirmar en los Estados Unidos que en estos dÃas México ha llegado económica y polÃticamente a la escena mundial. Ciertamente, las élites polÃticas, empresariales y sindicales de México han adquirido gran riqueza – explicable e inexplicable - desde la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte con Estados Unidos y Canadá en la década de 1990.
Sin embargo, la gran mayorÃa de los mexicanos se enfrentan a una lucha diaria por sobrevivir bajo un gobierno de alto nivel, a menudo ausente o corrupto, delincuencia común y organizada, y a la falta crónica de oportunidades de empleo formal, además de los más altos niveles de inseguridad desde la Revolución Mexinaca.[size=4]
A pesar de que #México está ahora atrapado en una transición polÃtica dolorosa, tiene el potencial de convertirse en una potencia económica y polÃtica. Pero no está allà todavÃa. Varios ingredientes necesarios están desaparecidos.
Por supuesto que todos los paÃses se ven afectados en alguna medida por la delincuencia organizada interna. Rusia y China generan los grupos criminales más poderosos que los de México, los paÃses de Europa occidental se enfrentan a las actividades transfronterizas sin ley de muchos grupos criminales bien financiados. Sin embargo, ninguno de estos paÃses experimentan estas formas extremas de violencia organizada, al igual que México y algunos de sus vecinos centroamericanos, los cuales se enfrentan a un ritmo sin precedentes de homicidios, tráfico de personas, el secuestro y la extorsión.
Las drogas ilegales y el acceso a las armas no causan en sà mismos tales extremos. Los estudios demuestran que los sindicatos del crimen organizado por lo general tratan de evitar la confrontación con los gobiernos centrales fuertes, prefiriendo operar en los mercados locales y regionales, que aumentan el lucrativo comercio de drogas ilÃcitas.
La violencia extrema de México se provoca más bien por los vacÃos de poder y los errores creados por los gobiernos crónicamente corruptos del paÃs. La corrupción crea grandes incentivos para que los grupos criminales consoliden sus mercados a través de la competencia salvaje en los vacÃos de "autoridad".
Bajo el gobierno federal conservador anterior, estados como Michoacán parecÃan haber sido infiltrado por organizaciones criminales sofisticadas, como La Familia Michoacana. En 2010, el medio hermano del gobernador de Michoacán, fue obligado a abandonar su escaño en el Congreso tras ser acusado de ser miembro de alto rango de La Familia, permaneciendo prófugo. En 2009, tres docenas de alcaldes en el estado fueron detenidos y acusados de trabajar para el crimen organizado, aunque más tarde fueron retiraron los cargos [por estar mal sustentados].
El Enjuiciamiento de figuras polÃticas en Michoacán se hizo difÃcil porque los fiscales estaban bajo el control polÃtico completo del Partido Acción Nacional . Por otra parte, los derechos de los acusados, perteneciendo todos ellos al partido de la oposición, se violaban con frecuencia, por lo que cualquier acusación era legalmente insostenible.
Más recientemente, la actual administración federal arrestó ala lideresa del sindicato nacional de maestros, acusada de malversación de 2 mil millones de pesos de los fondos sindicales. Antes de su acusación, que habÃa expresado objeciones a las reformas educativas del presidente Enrique Peña Nieto, que sólo reforzó la percepción de que las acusaciones penales se utilizan con fines polÃticos.
En los 12 años que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) estuvo fuera del poder, hasta que volvió a tomar la presidencia en 2012, muchas, pero no todas las instituciones autoritarias que se desarrollaron durante más de 70 años del PRI fueron desmanteladas. Sin embargo, ha sido mucho más difÃcil llenar los vacÃos de poder resultantes con las instituciones democráticas legÃtimas y estables.
Cada paÃs deben lograr a su manera su transición polÃtica. Sin embargo, el último acuerdo polÃtico entre las elites, llamada "Pacto por México" - en la que los lÃderes de los partidos de la izquierda y de derecha apunta a objetivos tales como las reformas sociales, económicas y polÃticas - es opaco y no cumple con la prueba de la democracia. La deliberación anulada pacto se brinco la deliveración en el Congreso, y se hizo sin consultar a la sociedad civil, y no especifica las medidas para mejorar la seguridad.
Para todos los efectos prácticos, el sistema judicial de México se ha derrumbado. Gobernadores de los estados, algunos de ellos bajo el control voluntario o involuntario de los grupos delictivos, tienen pleno poder sobre el nombramiento de jueces y fiscales y el lanzamiento de investigaciones de la policÃa, lo que garantiza la impunidad de sus partidarios polÃticos y empresariales.
Los intentos Infructuosos de México para hacer cumplir las leyes sobre lavado de dinero y decomiso de activos también demuestran la debilidad del Estado. El arrastre de pies de los polÃticos obstaculiza los esfuerzos internacionales para trabajar con las autoridades mexicanas en las investigaciones sobre los esquemas de lavado de dinero que podrÃan vincular el crimen organizado a figuras polÃticas y de negocios nacionales e internacionales.
Por otra parte, la falta de programas gubernamentales, en coordinación con las redes de la sociedad civil, para ayudar a evitar que la asociación criminal es otra área en la que el poder del Estado está muy lejos. No tener un sistema social semejante dice mucho acerca de por qué los jóvenes de México y Centroamérica se dibujan en el alza de los números en las pandillas urbanas que se transforman en grupos criminales transnacionales, como MS-13, que se originó en los Estados Unidos y se extendió a través de México y América Central
.
El sector privado mexicano hoy está sumergido en la economÃa informal más grande de todos los paÃses de la OCDE. Sus potenciales emprendedores, visibles, por ejemplo, entre los cientos de miles de "changarros" (vendedores ambulantes), están buscando la oportunidad de acceder a un crédito legal, para invertir y para asegurar puestos de trabajo formales. Una vez que una revolución del sector privado mexicano de alto crecimiento se quita, la juventud de la nación ven la necesidad de entregar su trabajo a la delincuencia organizada o de emigrar a los Estados Unidos.
Las organizaciones delictivas transnacionales están presentes en todos los paÃses. Drásticas reducciones de Estados Unidos y Europa en el consumo de drogas y la venta de armas o unidades para despenalizar los mercados de drogas no ayudará a México a mejorar la seguridad humana a menos que el paÃs complete primero su transición a la democracia a través de la eliminación de los vacÃos de poder del Estado y el establecimiento del imperio de la ley .
Edgardo Buscaglia es erudito en Derecho y EconomÃa en la Universidad de Columbia, y el presidente del Instituto de Acción Ciudadana en México.
@reformacom @nytimes @milenio @Televisa @TV_Azteca13
Por Edgardo Buscaglia

Las secuelas de un tiroteo en un vecindario de Acapulco Guerrero
Está de moda afirmar en los Estados Unidos que en estos dÃas México ha llegado económica y polÃticamente a la escena mundial. Ciertamente, las élites polÃticas, empresariales y sindicales de México han adquirido gran riqueza – explicable e inexplicable - desde la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte con Estados Unidos y Canadá en la década de 1990.
Sin embargo, la gran mayorÃa de los mexicanos se enfrentan a una lucha diaria por sobrevivir bajo un gobierno de alto nivel, a menudo ausente o corrupto, delincuencia común y organizada, y a la falta crónica de oportunidades de empleo formal, además de los más altos niveles de inseguridad desde la Revolución Mexinaca.[size=4]
A pesar de que #México está ahora atrapado en una transición polÃtica dolorosa, tiene el potencial de convertirse en una potencia económica y polÃtica. Pero no está allà todavÃa. Varios ingredientes necesarios están desaparecidos.
Por supuesto que todos los paÃses se ven afectados en alguna medida por la delincuencia organizada interna. Rusia y China generan los grupos criminales más poderosos que los de México, los paÃses de Europa occidental se enfrentan a las actividades transfronterizas sin ley de muchos grupos criminales bien financiados. Sin embargo, ninguno de estos paÃses experimentan estas formas extremas de violencia organizada, al igual que México y algunos de sus vecinos centroamericanos, los cuales se enfrentan a un ritmo sin precedentes de homicidios, tráfico de personas, el secuestro y la extorsión.
Las drogas ilegales y el acceso a las armas no causan en sà mismos tales extremos. Los estudios demuestran que los sindicatos del crimen organizado por lo general tratan de evitar la confrontación con los gobiernos centrales fuertes, prefiriendo operar en los mercados locales y regionales, que aumentan el lucrativo comercio de drogas ilÃcitas.
La violencia extrema de México se provoca más bien por los vacÃos de poder y los errores creados por los gobiernos crónicamente corruptos del paÃs. La corrupción crea grandes incentivos para que los grupos criminales consoliden sus mercados a través de la competencia salvaje en los vacÃos de "autoridad".
Bajo el gobierno federal conservador anterior, estados como Michoacán parecÃan haber sido infiltrado por organizaciones criminales sofisticadas, como La Familia Michoacana. En 2010, el medio hermano del gobernador de Michoacán, fue obligado a abandonar su escaño en el Congreso tras ser acusado de ser miembro de alto rango de La Familia, permaneciendo prófugo. En 2009, tres docenas de alcaldes en el estado fueron detenidos y acusados de trabajar para el crimen organizado, aunque más tarde fueron retiraron los cargos [por estar mal sustentados].
El Enjuiciamiento de figuras polÃticas en Michoacán se hizo difÃcil porque los fiscales estaban bajo el control polÃtico completo del Partido Acción Nacional . Por otra parte, los derechos de los acusados, perteneciendo todos ellos al partido de la oposición, se violaban con frecuencia, por lo que cualquier acusación era legalmente insostenible.
Más recientemente, la actual administración federal arrestó ala lideresa del sindicato nacional de maestros, acusada de malversación de 2 mil millones de pesos de los fondos sindicales. Antes de su acusación, que habÃa expresado objeciones a las reformas educativas del presidente Enrique Peña Nieto, que sólo reforzó la percepción de que las acusaciones penales se utilizan con fines polÃticos.
En los 12 años que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) estuvo fuera del poder, hasta que volvió a tomar la presidencia en 2012, muchas, pero no todas las instituciones autoritarias que se desarrollaron durante más de 70 años del PRI fueron desmanteladas. Sin embargo, ha sido mucho más difÃcil llenar los vacÃos de poder resultantes con las instituciones democráticas legÃtimas y estables.
Cada paÃs deben lograr a su manera su transición polÃtica. Sin embargo, el último acuerdo polÃtico entre las elites, llamada "Pacto por México" - en la que los lÃderes de los partidos de la izquierda y de derecha apunta a objetivos tales como las reformas sociales, económicas y polÃticas - es opaco y no cumple con la prueba de la democracia. La deliberación anulada pacto se brinco la deliveración en el Congreso, y se hizo sin consultar a la sociedad civil, y no especifica las medidas para mejorar la seguridad.
Para todos los efectos prácticos, el sistema judicial de México se ha derrumbado. Gobernadores de los estados, algunos de ellos bajo el control voluntario o involuntario de los grupos delictivos, tienen pleno poder sobre el nombramiento de jueces y fiscales y el lanzamiento de investigaciones de la policÃa, lo que garantiza la impunidad de sus partidarios polÃticos y empresariales.
Los intentos Infructuosos de México para hacer cumplir las leyes sobre lavado de dinero y decomiso de activos también demuestran la debilidad del Estado. El arrastre de pies de los polÃticos obstaculiza los esfuerzos internacionales para trabajar con las autoridades mexicanas en las investigaciones sobre los esquemas de lavado de dinero que podrÃan vincular el crimen organizado a figuras polÃticas y de negocios nacionales e internacionales.
Por otra parte, la falta de programas gubernamentales, en coordinación con las redes de la sociedad civil, para ayudar a evitar que la asociación criminal es otra área en la que el poder del Estado está muy lejos. No tener un sistema social semejante dice mucho acerca de por qué los jóvenes de México y Centroamérica se dibujan en el alza de los números en las pandillas urbanas que se transforman en grupos criminales transnacionales, como MS-13, que se originó en los Estados Unidos y se extendió a través de México y América Central
.
El sector privado mexicano hoy está sumergido en la economÃa informal más grande de todos los paÃses de la OCDE. Sus potenciales emprendedores, visibles, por ejemplo, entre los cientos de miles de "changarros" (vendedores ambulantes), están buscando la oportunidad de acceder a un crédito legal, para invertir y para asegurar puestos de trabajo formales. Una vez que una revolución del sector privado mexicano de alto crecimiento se quita, la juventud de la nación ven la necesidad de entregar su trabajo a la delincuencia organizada o de emigrar a los Estados Unidos.
Las organizaciones delictivas transnacionales están presentes en todos los paÃses. Drásticas reducciones de Estados Unidos y Europa en el consumo de drogas y la venta de armas o unidades para despenalizar los mercados de drogas no ayudará a México a mejorar la seguridad humana a menos que el paÃs complete primero su transición a la democracia a través de la eliminación de los vacÃos de poder del Estado y el establecimiento del imperio de la ley .
Edgardo Buscaglia es erudito en Derecho y EconomÃa en la Universidad de Columbia, y el presidente del Instituto de Acción Ciudadana en México.

Comment